De los 124 ayuntamientos que tiene la entidad, 13 de ellos fueron los únicos que mostraron interés de profesionalizar al personal y tener buenas prácticas para reducir las observaciones en las auditorías, puntualizó Lysette Raquel Lameiro Camacho, titular del Instituto de Administración Pública del Estado de Chiapas (IAP).
El objetivo, remarcó, siempre ha sido la preparación de los servidores del pueblo, sobre todo, a quienes tienen los cargos en niveles más altos.
Para las presidencias municipales y su personal, que haya capacitación se traduce en una mejor entrega de resultados y menos observaciones con las auditorías estatales y federales.
Acciones
Lameiro Camacho enfatizó que aunque los procesos de profesionalización no son obras o carreteras que están visibles, “es la que más duele cuando no se tiene y es la que más se observa después cuando termina el periodo administrativo de cada alcalde”, completó.
Profesionalizar, dijo, significa que la persona se debe preparar del cargo que está ocupando, viendo reglamentaciones y conociendo los procesos en las áreas administrativas.
Calidad en servidores públicos
El propósito del Instituto, remarcó, es que haya calidad en los servidores del pueblo, personas que deben servir y no de servirse. “Hemos avanzado muchísimo, no cabe la menor duda”, complementó.
Insistió que su palabra sigue empeñada en que no se permitirá que haya actos de corrupción en el IAP Chiapas, esto a pesar de que han existido ofrecimientos de algunos personas. “Quiero demostrar que cuando hay voluntad sí se puede”, añadió.
La titular del Instituto de Administración Pública del Estado de Chiapas (IAP), enfatizó que en este año se alcanzaron las metas programadas y se prevé que el 17 de este mes el gobernador de Chiapas, Eduardo Ramírez Aguilar, llegue para entregar reconocimientos a quienes se han sumado a la profesionalización.
Esto se debe, dijo, a que los ayuntamientos cumplieron con todos los lineamientos, reglamentos, manuales de operación, procedimientos, “ese tipo de gente es lo que necesita Chiapas”, remarcó.
De forma abierta, la maestra Lameiro Camacho comentó que el IAP se convirtió en la caja chica del gobierno, debido a que muchos se dedicaron a saquear.
“Y perdió la credibilidad en la capacitación y en la calidad académica. El 2025 hemos tratado de barrer todo el cochinero que se tiene y no prestarnos a malas prácticas”, remarcó.












