La falta de mantenimiento periódico, el tránsito de vehículos pesados y las condiciones climáticas de la zona han generado un deterioro progresivo que afecta la seguridad y funcionalidad del tramo Jitotol–Soyaló, según reveló un estudio.
Una investigación realizada por la ingeniera Greisy Valle Ramírez, como parte de su tesis profesional para obtener el título de Ingeniería en Topografía e Hidrología, evaluó el estado del pavimento en un segmento de la carretera federal 195 Villahermosa–Escopetazo, específicamente en el tramo Jitotol–Soyaló, entre los kilómetros 205+000 y 206+580.
La investigación, desarrollada mediante inspección visual y análisis topográfico, dividió el tramo en tres segmentos para un diagnóstico detallado.
Segmentos
Los resultados de la especialista de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (Unicach) indican que el primer segmento (205+000–205+500) presenta un estado aceptable, con un Índice de Serviciabilidad (PSI) de 3.4. El segundo (205+500–206+000) se encuentra en estado regular (PSI 2.7).
Mientras que el tercero (206+000–206+580) muestra un estado crítico, con un PSI de 1.5, considerado malo, donde más del 30 % de la superficie presenta fallas severas como baches profundos, pérdida de agregados y grietas de borde.
También se detectaron daños comunes en pavimentos flexibles, como grietas longitudinales y transversales, baches superficiales y profundos, roderas, pérdida de agregados y el característico agrietamiento en “piel de cocodrilo”, este último indicativo de una fatiga avanzada de la estructura.
El Índice de Serviciabilidad (PSI) es una herramienta clave que permite calificar el estado del pavimento en una escala del 0 al 5.
Deterioro
Los resultados obtenidos señalan que el tramo analizado ha perdido considerablemente su capacidad de servicio, pasando de una condición “aceptable” a “mala” en poco más de un kilómetro, lo que evidencia un acelerado proceso de deterioro que requiere atención inmediata de las autoridades correspondientes.