Trascendencia de población asiática en Villaflores

Jaime Flores, cronista adjunto del Consejo de la Crónica de Villaflores, Chiapas, realizó un esfuerzo documental y narrativo por ubicar a la población asiática en Villaflores, a principios de la década de los 30.

Flores ubicó las influencias culturales que han permeado en la actual población villaflorense, derivado de diversas migraciones que las condujo a radicar en la región Frailesca, siendo una de ellas las de origen oriental, insistió el cronista, “quienes comienzan a fallecer”.

Uno de los casos es el de don Nicolás Thang, considerado de los primeros comerciantes, así como don Romeo Chiu Natarén, recordado por sus muchos emprendimientos con Roberto Juan Mancilla, Well Chiu Méndez y Julio Chiu Natarén, que por mucho tiempo prestó el servicio al transporte frailescano. En los años 30, Villaflores no rebasaba los dos mil habitantes.

Personajes

El cronista narra la vida de don Roberto Juan Laisic, uno de los nueve pobladores chinos que llegaron a finales de la década de los 20 mediante el comercio de productos que se traían de Oriente.

Nació en Cantón, China, y por cuestiones de comprensión lingüística su primer apellido al llegar a América fue castellanizado a “Juan”, posiblemente pudo haber sido “Kuan” o “Huang”.

“Muy poco se ha tomado memoria de estos comerciantes asiáticos, pero en Villaflores sucedió un trágico episodio, donde estas personalidades chinas fueron asesinadas por órdenes de comerciantes locales que se sentían incómodos y desplazados en las ventas”, reconoció.

Flores retoma textualmente a Martín Mendoza, para decir: “En la memoria de algunos pobladores mayores de edad, se dice que los chinos tenían negocios donde era más barato, y tenían la mercancía más novedosa. Eso incomodó a la mujerada brava que dominaba el comercio en el naciente municipio, de tal forma que planearon hacerlos a un lado, presuntamente contrataron a uno sicarios”.

Leo Weibel, geólogo alemán, llegó a Villaflores en 1925 como parte de un estudio sobre la Sierra Madre de Chiapas (región fisiográfica). Calculó su población en un aproximado de mil habitantes, de los cuales nueve eran chinos y dos japoneses; cabe señalar que en Villaflores existían 10 tiendas, de las cuales tres pertenecían a chinos.

“Esta población se estableció en Villaflores, al igual que en el municipio de Tonalá y en gran parte del Soconusco, puesto que muchos de ellos eran comerciantes natos que comercializaban los productos traídos del lejano Oriente; tal era el caso de don Nicolás Tang, comerciante de telas”, explicó Flores.

El cronista confirmó la sobrevivencia de apellidos como Chiu, Juan, Chang, Wong, entre otros, que tienen conexiones familiares de origen asiático, quienes habitaron la zona de la Frailesca a principios de siglo.

“Actualmente, desde la década de los 2000, una pequeña oleada de población asiática, puntualmente de Cantón, ha llegado nuevamente a Villaflores, recreando la actividad comercial que se originó en la década de los 30, generando nuevamente esa impronta cultural que se transmite en la gastronomía, el lenguaje y la cultura”, finalizó.