Ana Keyla Álvarez Arzate, subsecretaria del Servicio Nacional de Empleo en Chiapas, consideró que actualmente uno de los principales retos para el estado, es lograr una vinculación laboral para personas migrantes y refugiados en la entidad.

Puntualizó que la población en contexto de movilidad tiene muchos factores negativos que enfrentar como la baja escolaridad, la inestabilidad, la validación de estudios y la xenofobia

Empleo

“En el Servicio Nacional de Empleo, se ha impartido talleres a empleadores y buscadores de empleo para fortalecer la sensibilización a las empresas, ya que había mucho desconocimiento de los procesos de contratación de una persona en calidad de refugiada”, subrayó.

Dijo que entre los retos mayores que han tenido es que en el sector empresarial se ha detectado dentro de la vinculación laboral antecedentes de Xenofobia.

“Una problemática constante es que muchas de las personas migrantes y refugiadas es de baja escolaridad, por lo que han tenido que canalizarlos o vincularlos a puestos operativos donde solo pueden percibir el salario mínimo”, destacó.

Obstáculo

“Otro fuerte obstáculo ha sido también la validación de estudios, que a veces las personas cuentan con la preparación académica en su país, pero para nosotros no es válido en un puesto con un perfil profesional”, sostuvo.

Recordó que dependen del sector empresarial para la vinculación laboral y para este sector, un tema determinante en la contratación es la inestabilidad de las personas que están un determinado tiempo en la entidad, pero a veces quieren seguir su tránsito, lo que resulta en un gran problema.