Unidades varadas; no hay dinero para reparaciones

De acuerdo con Rodulfo Gálvez Gómez, presidente de la Junta Nacional de Bomberos, hay unidades dentro de las estaciones que no se ha podido mover para dar servicios a la población ante la falta de recursos que, a veces, no alcanzan para cosas básicas ni tampoco para las reparaciones valuadas en miles de pesos.

En las instalaciones del lado oriente de Tuxtla Gutiérrez, dijo, se encuentran vehículos que requieren de mantenimientos con precios que rondan por los 280 mil pesos, mas no hay disponibilidad presupuestaria para cubrirlo.

En otros casos, explicó, se encuentran carros que ya son muy antiguos o que solo se usan para actividades recreativas en las instituciones, no obstante, esto último fue suspendido por la pandemia.

Uno de los principales problemas que enfrentan como agrupación, es cuando se presentan incendios de pastizales en zonas remotas de la capital, pues llevar los vehículos hasta esos lugares -en donde a veces solo entran las carretas- implica un desgaste de las cajas de velocidades, llantas y otros materiales de las unidades.

De los seis vehículos que se tienen en la capital de Chiapas, recordó, apenas se utilizan cuatro y se dividen en los de ataque rápido y ambulancias. Las reparaciones, explicó, son muy frecuentes al tratarse de unidades que tienen varios años de uso.

Los bomberos tienen que hacer una administración del dinero muy precisa, toda vez que reciben entre 130 y 140 mil pesos de forma mensual gracias al apoyo de la gente, que se refleja en el Sistema Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Smapa).

Con ese dinero se tiene que comprar combustible, salarios (apoyo), alimentación, materiales y gasto corriente (luz, instalaciones, agua, teléfono).

Ahora las autoridades municipales, destacó Gálvez Gómez, han hecho un esfuerzo para aportar otros 150 mil pesos de forma bimestral, sin embargo, para que haya una atención a las emergencias sin preocupación económica los “tragahumo” deberían recibir un ingreso promedio de 600 mil pesos cada cuatro semanas.