Las intensas lluvias que han azotado esta semana a Tuxtla Gutiérrez, causando múltiples inundaciones, son un problema recurrente que requiere acciones urgentes de infraestructura, advirtió Felipe Irineo Pérez, director del Organismo de Cuenca Frontera Sur.
Pérez subrayó que la situación en la capital es crítica y demandó “atacar la situación pluvial” de manera integral para evitar crisis futuras.
“Lo que es común, es que cuando hay una lluvia mayor de 30 a 40 mm la ciudad tiende a inundarse. Ese problema lo vamos a tener siempre mientras no ataquemos la situación pluvial de aquí de Tuxtla”, declaró Pérez durante una entrevista.
Ilustró la gravedad con el evento de la víspera del día lunes, cuando “en un tiempo muy corto hubo una cantidad de lluvia, de 65 mm en media hora”, lo que provocó graves afectaciones en las calles de la ciudad.
Estudiar y proyectar arroyos
Frente a la situación específica de Tuxtla Gutiérrez, Pérez reveló que el organismo a su cargo ya tiene identificado el núcleo del problema y una hoja de ruta potencial.
“En Tuxtla tenemos 34 arroyos, los tenemos ya analizados. Cada uno de esos arroyos debe hacerse un estudio y proyecto ejecutivo para que no se provoquen los problemas que hay en cada temporada de lluvia”, afirmó.
Esto implica que cada uno de estos cauces naturales o modificados que atraviesan la ciudad requiere un diagnóstico detallado y un plan de obra específico (proyecto ejecutivo) para mejorar su capacidad de conducción y control, evitando así que las lluvias intensas desborden e inunden las calles, como ha ocurrido recurrentemente esta semana.
La solución planteada para Tuxtla Gutiérrez, aunque clara en su diagnóstico, requerirá una inversión significativa y una ejecución coordinada para materializarse y mitigar el problema de fondo que afecta a los tuxtlecos cada año.
Costa, zona crítica
El director extendió su alerta a la región costera de Chiapas, identificándose como la zona donde se esperan las mayores afectaciones durante la temporada de lluvias en curso.
“Conocemos comúnmente que la zona de la Costa es la que provoca muchos problemas... ¿Qué sucede? Que todos los ríos ahí... una vez que empieza la temporada de lluvias hay mucha erosión por la deforestación que se ha llevado a cabo en la zona de la Sierra”, explicó Pérez.
Este proceso, detalló, arrastra grandes cantidades de sedimento hacia los ríos de la planicie costera, colmatándolos y reduciendo su capacidad de conducción.
“Por lo tanto, la mayoría de los ríos que están precisamente desde Tonalá y Arriaga hasta Suchiate están azolvados”, enfatizó el funcionario, anticipando que esto agravará el riesgo de inundaciones en esas poblaciones costeras ante cualquier precipitación significativa.
