Vecinos de Plan de Ayala piden reubicación
Los habitantes de Plan de Ayala han estado pugnando por la atención de las autoridades, debido a las acciones radicales de los normalistas. Carlos López / CP

Aunque hace un par de semanas se detuvieron las movilizaciones por parte de los estudiantes de la Escuela Normal Rural Mactumactzá y de que liberaron la obra de construcción del doble paso a desnivel sobre el libramiento Norte, los vecinos de la colonia Plan de Ayala Norte piden que la escuela sea reubicada ante las constantes molestias que les generan las protestas.

En un documento enviado a finales de marzo a las diferentes autoridades de los tres niveles de gobierno, los pobladores de esta colonia del sur de la capital chiapaneca, exponen una argumentación legal con respaldo en las normas federales, estatales, e incluso de vialidad municipal. Los quejosos detallan que son habitantes de la colonia (Plan de Ayala) y disponen a sus representantes.

Informan que desde hace varios años han venido sufriendo las acciones de los alumnos de la Mactumactzá, quienes a menudo promovían una serie de bloqueos, disturbios y agresiones, además de la toma de manera violenta de vehículos particulares del servicio público y de empresas, para atravesarlos en diversos lugares de esta ciudad capital, generando con ello un caos vial.

Señalan que de manera particular han llegado al hartazgo ante los constantes bloqueos que se suscitan en las vías públicas que se encuentran a la altura de la empresa Coca Cola, de la carretera San Fernando y de La Pochota, ya que son los accesos y salidas que tienen los habitantes de la colonia.

Por lo anterior, solicitan que se intervenga de manera inmediata y se giren las instrucciones a las dependencias correspondientes para que den pronta solución a los planteamientos realizados.

Asimismo, a que las peticiones de los estudiantes sean resueltas de manera pacífica, que se reubique a la escuela, así como girar instrucciones para que se garantice la seguridad y la tranquilidad de los habitantes de la colonia, como por igual de toda la ciudadanía.

El documento señala que la libertad de tránsito es una necesidad de todos los individuos. Por consiguiente, se engloba dentro de los derechos humanos fundamentales de todo ser humano, por lo que debe ser respetado.