Habitantes del centro de Tuxtla han tomado acciones para combatir la inseguridad, la prostitución y la acumulación de basura, temas que han ganado terreno en los últimos años, por diferentes factores, entre ellos la opacidad de dependencias encargadas de estos temas.
En este sentido el grupo denominado “Vecinos Unidos del Barrio San Roque, han implementado mecanismos para combatir estos problemas.
Con anticipación los habitantes de este tradicional barrio han denunciado la gran cantidad de robos, asaltos, y grupos que se dedican a cometer todo tipo de ilícitos en la zona, por lo que han tomado acciones por cuenta propia.
Ellos mismos han creado un sistema de seguridad vecinal que consiste en tres puntos fundamentales: el uso de un silbato para alertar a los habitantes sobre un delito, dividido en tres alarmas de tres toques, o sonido constante y el alertamiento a través de un grupo de WatsApp sobre situaciones de riesgo.
Entre estas propuestas, ciudadanos acordaron que los colonos se sumen a prender las luces localizadas afuera de las viviendas para tener una mejor iluminación en un horario de 6 a 10 de la noche.
Este grupo conformado a mediados del año 2016 han logrado la reparación de las calles y mejora de servicios, han podado árboles, limpiado espacios públicos y pintado guarniciones para el mejoramiento urbano.
Otro grupo de vecinos cerca de este lugar, en el Barrio Santo Domingo también ha tomado acciones por cuenta propia para lograr mejoras en su entorno.
En este punto de la ciudad los habitantes han denunciado que el principal problema es la proliferación de prostitución a todas horas del día.
En una denuncia realizada en la página oficial del Barrio Santo Domingo dieron conocer que en una reunión sostenida “los colonos y vecinos decimos ‘Ya Basta de Prostitución’ en las esquinas de nuestro barrio”.
Señalaron que las personas que ejercen ese oficio lo hacen descaradamente, sin ropa interior y mostrando sus genitales.
Por ello hicieron un exhorto al gobierno municipal y estatal, regule estas prácticas, además de aplicar las faltas administrativas correspondientes, “ya basta de corrupción de las autoridades de seguridad que ha solapado el problema, el cual ha dañado la imagen del barrio”.
Han sido los mismos vecinos de este lugar quienes también han recuperado el parque del mismo nombre, limpiado las calles y se han organizado para contar con espacios más dignos.
En ambos casos exponen que la organización ha sido una necesidad ante la falta de respuesta efectiva de las dependencias encargadas de los temas en cuestión.