Bajo la vigilancia permanente de la Guardia Nacional y de autoridades estatales y municipales, miles de extranjeros se arremolinan en los alrededores del Parque Ecológico “Los Cerritos” en Tapachula, para solicitar al Instituto Nacional de Migración (INM) la Forma Migratoria Múltiple (FMM), a fin de continuar su viaje hacia los Estados Unidos.
Los pocos agentes migratorios comisionados al Centro de Atención Provisional (CAP) son rebasados en su capacidad para recibir las peticiones, aunque ayer lunes ha habido mayor control y orden al momento de registrar a grupos de 700 personas.
Actualmente, son miles de migrantes los que están ingresando a territorio mexicano en busca de alcanzar el “sueño americano”; tras cruzar la frontera llegan al CAP, mientras que otros se diseminan en la ciudad y se presentan ante la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) para solicitar asilo.
De acuerdo con las autoridades, los migrantes proceden de diversas naciones de África, Asia, Sudamérica, Centroamérica, Cuba y Haití, quienes al obtener la FMM de inmediato parten al norte del país, ya que su intención es cruzar a los Estados Unidos.
Paola, originaria de Venezuela, recibió su documento migratorio (FMM) y ya con ello en mano, aseguró que seguirá avanzando; aunque quería irse en avión, les comentaron que solamente pueden hacerlo por la vía terrestre, para lo cual tienen un lapso de 45 días.
Ante la alta concentración de migrantes, la semana pasada se registraron diversos disturbios y enfrentamientos entre los propios migrantes que exigían una atención prioritaria.
Las filas son largas y todos los días llegan más extranjeros para solicitar atención y así poder obtener un permiso de legal estancia, ya que ello les permitiría pedir asilo en los Estados Unidos.