México * Notimex. En casa propia, la selección de Alemania no sólo tomará la Copa FIFA Confederaciones 2005 como preparación hacia la Copa del Mundo 2006, sino que buscará ganarla y así comenzar una fiesta que culmine con la obtención de la justa mundialista frente a su público.

El seleccionado teutón se presenta por segunda ocasión en esta competencia luego que en su primera intervención, México 99, tuvo una actuación lamentable al quedar fuera en la primera fase, y donde fue goleado por Brasil 4-0 en el estadio Jalisco.

En aquella ocasión, la selección germana presentó un equipo lleno de suplentes que, sin embargo, ahora forman la base del equipo que luchará por el título.

Bajo la batuta del ex goleador Jürgen Klinsmann, Alemania es sin duda el gran favorito, no sólo por ser local, sino por el gran equipo con el que cuenta y por su característica de nunca dar nada por perdido.

La primera ronda no debe presentar mayor problema para los anfitriones a excepción de su duelo ante Argentina, ya que Túnez y Australia son rivales de inferior nivel futbolístico a los que debe derrotar.

Frente al equipo sudamericano, Alemania tendrá su más complicado encuentro en el que seguramente se jugará el primer sitio del Grupo A.

Un aspecto que siempre ha caracterizado a los representativos teutones ha sido su gran disciplina, despliegue físico, talento, y principalmente, la gran fortaleza anímica que los ha llevado a resolver favorablemente situaciones en la que parecen liquidados.

En la portería, Klinsmann deberá decir por el veterano Oliver Khan o por Jens Lehman.

El primero ha demostrado ser uno de los mejores guardametas del mundo, pero su nivel ha decaído a últimas fechas. Lehman por su parte es menos experimentado, pero con grandes reflejos y presencia.

El inicio de las jugadas de gol del representativo de Alemania deberá recaer en el mediocampista Michael Ballack, quien es sin duda el jugador con más talento y visión de campo con el que cuentan.

El punto más débil que presentan es el eje del ataque, ya que en este momento no cuentan con un delantero letal, como lo fueron Klinsmann, Rudi Voeller, Gerd Muller u Oliver Bierhooff en sus tiempos.

Miroslav Klose no atraviesa precisamente por su mejor momento, mientras que Kevin Kuranyi es muy inconsistente, pues de la misma manera puede brindar un buen partido o pasar desapercibido.