Tras cuatro años de espera arrancó la edición 2024 de la Eurocopa con una aplastante victoria de los favoritos y anfitriones Alemania, que no encontró oposición en una débil selección de Escocia, que se llevó un categórico 5-1 y terminó con diez hombres.
El partido del grupo A de la competencia se efectuó este viernes en el Allianz Arena de Munich ante un lleno total y una emotiva inauguración, donde se le rindió un homenaje a la gran leyenda alemana Franz Beckenbauer (campeón del Mundo como jugador y entrenador), quien falleció el pasado 7 de enero.
Los alemanes apenas necesitaron diez minutos para abrir el marcador, gracias a Florian Wirtz, quien en los linderos del área sacó el derechazo raso que el guardameta escocés Angus Gunn no pudo sacar pese a su estirada.
Con el primero en contra fue cuestión de tiempo para que se diera la goliza; el segundo tanto cayó al minuto 19 a través de una gran jugada de Jamal Musiala, quien dentro del área se quitó a un zaguero y sacó un derechazo al ángulo.
Antes de acabar la primera parte se sentenció el encuentro a través de un penal que revisó en el VAR el árbitro Clément Turpin: Ryan Porteous se barrió con excesiva fuerza en la disputa de un balón dentro del área y golpeó a Gündogan, penal y tarjeta roja, mismo que convirtió sin problema Kai Havertz al 45+1.
Para la segunda parte se esperaba que el trámite fuera igual de complicado para los escoceses, que poca resistencia pudieron ofrecer; el cuarto gol cayó a través de Niclas Füllkrug al 68, cuando recibió un rechace dentro del área y mandó con fuerza el esférico al fondo de la red. Minutos después Alemania pudo conseguir el quinto tanto, pero un apretado fuera de juego de Füllkrug lo impidió.
Entonces cayó el de la honra, al minuto 87, gracias a un autogol del defensa Antonio Rüdiger, quien en un rechace cabeceó a su portería para superar a Manuel Neuer. Ya en tiempo de reposición Emre Can (90+3) puso el lapidario 5-1.
Este sábado, Hungría y Suiza, los otros integrantes del grupo A, entran en acción. El próximo miércoles Alemania se mide con Hungría y Escocia con Suiza.