La capital chiapaneca se sumó este domingo a una iniciativa que recorrió todo el país: la primera Rodada Nacional por La Paz. Desde tempranas horas, un total de 980 personas se dieron cita en el parque Bicentenario, respondiendo a la convocatoria emitida por la presidenta nacional, Claudia Sheinbaum Pardo, quien impulsó esta actividad con el objetivo de fomentar la práctica deportiva y fortalecer el mensaje de unidad en México.
El ambiente previo a la salida fue de entusiasmo y convivencia. Entre los participantes se encontraban familias completas, grupos de amigos, ciclistas experimentados y niños que debutaban en un evento de este tipo, algunos sobre bicicletas y otros en patines. Autoridades deportivas locales y representantes de la comunidad se hicieron presentes para respaldar la causa, destacando la importancia de unir esfuerzos para promover hábitos saludables y un entorno de respeto.
Banderazo de salida
En punto de las 7:30 horas se dio el banderazo de salida. Los ciclistas y patinadores comenzaron su recorrido de 12 kilómetros que partió desde el parque Bicentenario, avanzando por la emblemática avenida Central hasta llegar a la Diana Cazadora, punto donde realizaron el retorno para dirigirse nuevamente hacia la meta. Durante el trayecto, la ciudad se llenó de color y movimiento, con los participantes portando camisetas alusivas y banderines que reforzaban el mensaje de paz.
El recorrido transcurrió en un ambiente seguro, gracias a la coordinación de autoridades de tránsito y personal de apoyo que resguardaron las vialidades. Los aplausos de ciudadanos que observaban desde las aceras acompañaron a los deportistas en todo momento, generando una sensación de comunidad que iba más allá de la actividad física.
Entre abrazos y medallas
Al cruzar la meta, todos los participantes recibieron una medalla conmemorativa como recuerdo de su esfuerzo y de su compromiso con la causa. Las sonrisas, las fotografías grupales y los abrazos entre amigos y familiares fueron parte de un cierre lleno de energía positiva.
El mensaje final del evento, pronunciado por los organizadores, enfatizó la relevancia de mantener la práctica deportiva como un medio para mejorar la salud, prevenir conflictos y fortalecer los lazos sociales. La Rodada Nacional por La Paz, más que una simple actividad recreativa, se convirtió en un recordatorio de que el deporte es una herramienta poderosa para construir un país más unido y pacífico.