Qué nos dejaron los partidos de miércoles de Champions LeagueLos otros cuarto partidos de ida se disputaron ayer, y cuatro equipos tomaron un importante paso rumbo a los cuartos.
¿Suerte de campeón?
Si vieran solo el marcador final, pensarían que Liverpool mantuvo su mismo dominio que ha tenido toda la temporada ayer en el Parque de los Príncipes. En realidad, el 0-1 a su favor fue sumamente engañoso, y el gran héroe de la noche fue Alisson Becker.
El PSG fue amo y señor del partido, incluso yéndose al frente con un golazo de Kvicha… que fue anulado por centímetros. Los ingleses se encargaron de defender de inicio al final y estaban contentos con el 0-0 mientras los parisinos se desesperaban, y en los minutos finales apareció un jovencito llamado Elliot para, con una excelente definición, darles el “inmerecido” triunfo de regreso a Anfield.
Si escogiera cuál ha sido el mejor equipo de la temporada hasta ahora sin duda ese sería Liverpool, pero el París ha estado jugando a un altísimo nivel en las semanas recientes, y por ello puse aquí que no me sorprendería que eliminaran a los Reds… y en parte tuve razón, porque fueron superiores pese a que el marcador indica lo contrario. Espero un duelo muy parecido en la vuelta el martes, pero el estadio, la mística y la historia están a favor de los de rojo.
Un Barça distinto
Pocos equipos en el mundo son más orgullosos de su forma de jugar que el Barcelona, algo que, para ellos, los distingue de su máximo rival. Pero casi todo ello se ha ido por la borda gracias al pragmatismo de Hansi Flick, y pocos Culés se quejarán de ello.
Es un equipo más práctico, más directo y más frío que cualquier otro cuadro Blaugrana en el último lustro. Recordemos que estos dos conjuntos se vieron las caras hace unas semanas con un espectacular 4-5 final, y ayer esperábamos muchos goles otra vez pero fue un partido totalmente diferente.
El punto que marcó el encuentro fue, sin duda, la expulsión de Cubarsí, muy justa, que obligó al Barcelona a replegarse y dejar solo en punta a Lewandowski esperando algún chispazo. Flick se sabía contento de salir de Lisboa sin daño y así ajustó el partido, aguantando y dejando que Szczesny se luciera como no lo había hecho aún desde su des-retiro.
Fue Raphinha, uno de los grandes candidatos al Balón de Oro junto a Salah y Mbappé, quien aprovechó una mala salida y, con algo de fortuna, le dio un triunfo que Flick se sacó de la manga. El Barcelonismo está urgido de triunfos más que de volver a jugar bonito, y eso es justo lo que Hansi les está dando. Valiosísimo triunfo ante un Benfica que desaprovechó jugar con uno más por 70 minutos.
Debacle
Entre todo el drama del derby madrileño pasó por desapercibido otro clásico: Bayern-Bayer. Todos los visitantes ayer tomaron ventaja… menos el Leverkusen, que fue superado totalmente por los Bávaros. Penales, rojas, osote de su portero y desesperación total; fue un desastre para Xabi Alonso y compañía, y parece que este año el mismo equipo les quitará la Bundesliga y los eliminará de la UCL.
En otra liga
Así como en la ronda anterior todos los italianos hicieron el ridículo, quedando todos eliminados pese a ser favoritos (Atalanta, Juve y Milán contra Brujas, PSV y Feyenoord, respectivamente), así parece que le sucederá ahora a los holandeses.
El martes el Eindhoven recibió solo un “touchdown” del Arsenal, mientras ayer el Feyenoord ni las manos metió ante el Inter. El 0-2 en Rotterdam se quedó corto, ya que entre el penal errado de Zielinski, las fallas de Lautaro y la pasividad del Inter en los últimos minutos, los Nerazzurri podrían fácilmente haberse llevado una mayor ventaja al Giuseppe Meazza.
Lo dije la semana pasada y lo repito: el Inter Milán es el mejor equipo actualmente en Italia y es el único que podría alzar la mano en este torneo, y no los descarto para llegar a la final viendo su parte del cuadro. Mientras tanto, se nota que la Eredivisie sigue algunos peldaños abajo en el panorama europeo.
¡Hasta la próxima!
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