Mamás demuestran sus habilidades

Treinta mamás de jugadores de la Liga Municipal de Softbol Femenil de Tuxtla Gutiérrez se pusieron el uniforme, agarraron el bate y disputaron un partido amistoso organizado por la dirigencia del certamen. El evento se llevó a cabo en el campo infantil de Caña Hueca y se contó con la presencia de árbitros oficiales.

Con la representación de los siete equipos actualmente inscritos en la liga femenil, se efectuó el encuentro entre los combinados de Grupo A y Grupo B, mismos que dieron un gran espectáculo para los asistentes al campo de pelota en Caña Hueca.

El Grupo A fue el encargado de abrir el primer capítulo. Las jugadores aún con nerviosismo salieron a la caja de bateo para buscar conectar los primeros “hits”. A pesar de las ganas y de los varios intentos, el picheo de Mercedes Orantes de Grupo B pudo contrarrestar a las rivales y solamente permitieron una carrera, por lo que la primera entrada quedó 1-0.

Para la segunda entrada habría relevo atómico en el picheo del Grupo A, con Alma Mora inyectando veneno puro en cada lanzamiento y cambios de velocidades dignos de juego de estrellas. El Grupo B debió hacer ajustes en su batería para contactos sólidos que dieron pauta a jugadas cerradas con barrida de Yenni Zavala ante su compañera Alejandra Tovilla, ambas del equipo Chicas Ámbar.

Los dos cuadros se soltaron más a partir del tercer “inning” y continuaron sumando “rayitas”, al grado que ambas novenas ya tenían un total de diez carreras a su favor y el empate 10-0 en la pizarra dictaminaba la paridad del encuentro.

Contra todo pronóstico y por regulación de las autoridades del parque recreativo y Deportivo Caña Hueca, debido a las altas temperaturas, terminó el partido con resultado final de empate a 15 carreras. Un cierre espectacular para conmemorar a las mamás en su día. El evento fue clausurado por la presidenta de la liga, Rosi Maza, acompañada de los integrantes de mesa directiva, Carmen Vera, Graciela Guzmán y Manuel Cruz, otorgando reconocimientos y obsequios a las participantes.

Al final todas las jugadoras se tomaron fotos, sin importar el color de su uniforme, demostrando que la finalidad de esta actividad era pasar un rato agradable y demostrar sus habilidades en la disciplina del Softbol.