Camaleónico como es, Miguel Herrera acabó de desechar las plumas de Águila que le quedaban y se pintó las rayas de Tigre. “El Piojo” ahora se dice el “Tigre número 1”, dispuesto a dar lo mejor de sí para llevar a este equipo donde debe estar.

“Me siento contento e ilusionado por mi llegada… Desde este momento soy el Tigre número uno y defenderé esta playera a muerte”, manifestó convencido, aunque esa frase la dijo también cuando dirigía al América. “El pasado ya quedó atrás. Trataré de hacer las cosas lo mejor posible”, agregó.

El grupo, afirmó, “me recibió bien, saben que la temporada pasada no fue la mejor, pero solo es un bache. Hay calidad, cantidad y ojalá que pueda decir dentro de poco que este es el mejor equipo que he dirigido y será obteniendo buenos resultados”.

Espera no moverle mucho al plantel. “Lo bien hecho no hay que tocarlo”, aseveró, pero los cambios ya comenzaron. Julián Quiñones se fue el Atlas. “Cuando llegué, eso ya estaba acordado”, señaló, pero además tiene que dar de baja a un extranjero más, por reglamento, ya que todo equipo en la Liga MX debe registrar solo a diez y a Tigres le sobra uno. Leo Fernández es el señalado para irse.

“Le dije que me deje a mí la decisión, vamos a esperar y no cerrarnos a nada; puede llegar alguien de último momento e insertarse en el equipo. Hoy nada está decidido… Julián ya no está en el plantel. Lo demás son rumores. Debemos reducir la cuota de extranjeros por reglamento. Ya decidiremos quién será”, indicó.