Mónaco afianza su campeonato

Mónaco Centenario derrotó a Cuates FC con un apretado marcador de 3-2 en la gran final del torneo de Futbol Copa Santos Tuxtla que se disputó en las instalaciones de la cancha Territorio Santos Tuxtla (TST). A pesar de que los ahora bicampeones comenzaron abajo en la pizarra, lograron revertir el mal resultado y se llevaron nuevamente la gloria.

Los dos planteles llegaron al escenario final que se celebró en el poniente de la ciudad capital. Ambos al conocerse y haberse visto las caras en dos ocasiones en la temporada regular, eran sabedores de los peligros que se podrían presentar si no cuidaban la marca. El primer tanto cayó al 6’ de la primera mitad cuando Osvaldo Madariaga se encontró una pelota en el área rival y remató de manera correcta para poner el 1-0 que adelantó a Cuates FC.

De manera sorpresiva, Mónaco Centenario cobró el saque de la reanudación del tanto recibido con un disparo directo por parte de Luis Fernando Sánchez quién obtuvo el empate 1-1 tras mandar la bola dentro de los tres palos luego del zapatazo emitido desde la media cancha. Tan solo tres minutos más tarde, de haber igualado los “cartones”, de nueva cuenta los de la colonia Centenario se adelantaron con un tiro de Diego Velázquez para el 2-1 e irse con ventaja al descanso.

En la parte complementaria rápidamente los de Cuates FC se volcaron hacia al frente con la intención de igualar las acciones. En el primer minuto del segundo tiempo Daniel Aquino y Octavio Madariaga construyeron una jugada de ensueño en donde este último quedó frente a la portería rival para únicamente empujar la de gajos y colocar el 2-2 que los hizo soñar en obtener la voltereta y posteriormente el título.

Cuates FC tuvo la oportunidad de adelantarse dos minutos más tarde mediante un tiro penal, sin embargo el portero de Mónaco lo impidió y mantuvo la igualdad 2-2. Con el ánimo en lo más alto, los actuales campeones intentaron llevarse la victoria antes de que acabara el compromiso, a siete minutos del final lanzaron un tiro de esquina que rebotó en un defensor rival y que cambió el rumbo de la esférica para que esta se incrustara dentro de los tres palos marcando así un autogol que dictaminó la victoria de 3-2 a favor de Mónaco.