Orizow, ejemplo de constancia y tenacidad
Esfuerzo y constancia son esenciales para mantenerse apegado a la disciplina que se requiere. Diego Pérez/CP

Golpes, patadas, carácter y fuerza sobre el tatami, para orgullo de su academia y de su familia. Es Orizow Estrada Morales, contador público de profesión que aprovecha su habilidad con los números para calcular los tiempos que le permitan mantenerse activo y en forma a través del deporte que más ama: el Karate.

Originario de Tuxtla Gutiérrez, es cinta negra y alumno del profesor Gilberto Hernández Maza en el Dojo Universitario. Ha competido en diversos torneos estatales y recientemente sumó a sus logros el haber representado a México en el Campeonato Mundial de Monterrey, Nuevo León.

En entrevista con “Cuarto Poder”, el veterano karateka compartió cómo es su diario vivir para poder mantenerse activo en las Artes Marciales, cuando muchos a su edad (50 años) ya han abandonado el deporte.

Primeramente, ¿cómo fue su acercamiento al Karate Do?

Fue en la universidad, cuando estaba estudiando el tercer semestre de mi carrera llegó la invitación. El maestro Gilberto (Hernández Maza) me invitó aquí a su dojo. Empecé a los 19 años, aunque dejé de practicar a los 21. Tuve a mi familia, a mis hijos, me dediqué al trabajo y lo retomé hace 5 años, desde el 2017.

En su caso, ¿cuánto entrena a la semana?

Vengo tres días a la semana: lunes, miércoles y viernes. Trato también por mi cuenta de entrenar un poco en casa.

¿Qué es lo que más le gusta del Karate?

Me gustan tanto katas (formas) como kumite (combate). Practicar una kata es como un combate imaginario, pero también lleva mucha fuerza, que es la parte fundamental de Karate, la esencia. Va uno visualizando los golpes; por ejemplo, dentro de una kata que practico hay un movimiento del brazo a la altura de la cabeza, es imaginar dónde va el golpe y encontrarle el sentido, no nada más es la forma.

¿Qué es lo más satisfactorio de practicar este arte marcial?

Me gusta la disciplina; aparte, es mi pasión como deporte. El Karate transmite mucha disciplina, en mi formación me ha ayudado mucho en eso, en ser leal también, forma parte de mis principios… primero por mi familia, que vean que a pesar de mi edad estoy haciendo un deporte, que no solamente estoy dedicado al trabajo y a ellos, sino que también vean que de manera independiente me esfuerzo por hacer deporte.

A nivel deportivo, ¿cuáles son sus mayores satisfacciones?

Antes de la pandemia había ido a torneos nacionales, participamos en combates, sacamos cuartos, terceros o segundos lugares y la idea es esa, competir, pero hacerlo por la familia.

¿Qué aspectos cuida más ahora en edad adulta para mantener esta constancia?

Más que nada, tratar de buscar los espacios, no dejarlo mucho tiempo porque, como en cualquier actividad, se enfría uno. Si estoy en la oficina y sé que no voy a poder venir a entrenar, ahí mismo estoy pateando o haciendo lagartijas (planchas).

Finalmente, ¿recomendaría a más gente a practicar Karate?

Sí, más en los adultos, ahora sí que por disciplina y salud. En mi caso, dejé de practicar un tiempo por la pandemia y las rodillas y pies se me estaban engarrotando, y ahora están normales, así que uno mejora físicamente. También en el estado mental porque te motiva a ser más despierto, y en la parte física te hace más hábil, ya no eres tan perezoso. Por salud recomiendo a los adultos, arriba de los 40 años, practicar Karate.