Se paraliza el país. Y se paraliza Chiapas y se paraliza Tuxtla Gutiérrez. Dicen que no les gusta el Futbol, pero les gusta, de alguna manera les gusta. ¡Es que juega México!
Las sucursales bancarias lucen semivacías, incluso un día después del “puentazo” por el 20 de noviembre. Las combis también van a medio llenar, aunque tal vez sea porque es martes, pero tal vez no. A muchos no les importa el Futbol, pero a otros muchos sí.
En las oficinas de gobierno detienen un poco sus actividades y le siguen la huella al Tricolor, que esta mañana juega ante la Polonia de Robert Lewandowski, uno de los delanteros más cotizados del mundo y que juega para el Barcelona de España.
Algunos restaurantes encienden sus pantallas y suben el volumen como pocas veces en el año. Es temprano aún para los botaneros. Con un café y un jugo de naranja es suficiente. Unos huevos rancheros, el complemento.
Manojo de nervios
En el primer tiempo hay un manojo de nervios, aunque aflora la esperanza. Si Argentina perdió ante Arabia Saudita en la madrugada por 2-1, ni modo que México no le pueda ganar a Polonia. Al menos un empate.
Algunas pocas llegadas se ahogan en un “uff”. Una radio “cultural” pone la transmisión de Televisión Azteca, y de seguro hoy tienen más público que otros días. La segunda mitad llega en menos de lo que cae un gol y entonces los malditos penales, pero en contra.
San Memo
Robert Lewandowski es jaloneado en el área grande. El árbitro recurre el VAR para ver la repetición y… ¡no!: es pénalti a favor de la selección polaca.
En la portería, Memo Ochoa bailotea con su traje azul, mientras muchos aficionados le rezan a alguien. Cruzan los dedos. Hacen “changuitos”. Después de un gran silencio hay un momento de júbilo. El portero americanista ha detenido la pena máxima y muchos no lo pueden creer, pero lo festejan. Ahora es #SanMemo en redes sociales.
Gerardo “El Tata” Martino, al que muchos critican, decide algunos cambios. Entra Raúl Alonso Jiménez, quien casi no ha tenido actividad tras una lesión en la cabeza hace varios meses, pero los futboleros se emocionan. Le rezan también.
El “Chuky” Lozano no ha logrado hacer la travesura y el partido se acaba, mientras algunos comensales del restaurante Vips Oriente piden el segundo café, y unos más, la cuenta. La voz del “Perro” Bermúdez suena en el Canal 5 de Televisa, donde también intervienen Javier Aguirre y Ricardo La Volpe, extécnicos del Tricolor. Todos elogian el empate, pero no es suficiente, hay que ganar.
¡Sambombazo casi al minuto 95! Llega México. Se acaba el tiempo. ¡Tirititito nomás! Señoras y señores, se acabó el encuentro. No llegó su majestad. Todos de vuelta al trabajo y a pensar en Argentina y en Messi.