Virtualmente en Tokio, Aremi cumplió 27 años

Nacida en Tonalá, Chiapas, un 23 de mayo de 1993, Aremi Fuentes Zavala se apasionó por el deporte desde pequeña, empezando en las pistas de atletismo, una disciplina que le sigue encantando y que de alguna forma la catapultó a su actual disciplina, el Levantamiento de Pesas, en donde es prácticamente un hecho que logrará el objetivo de su vida: llegar a unos Juegos Olímpicos.

Incluso, Aremi representó a Chiapas por dos años en Olimpiadas Nacionales Juveniles, pero como no consiguió medallas se animó a probar sus opciones en la Halterofilia a los 14 de edad.

Tras tomar parte en unas pruebas, la tonalteca recibió comentarios positivos de los captadores de talento del Instituto del Deporte de Chiapas, quienes la motivaron a dejar el atletismo y probar en el Levantamiento de Pesas, logrando su primera medalla -de bronce- en un Nacional en el 2007.

Hoy día, 13 años después, Aremi está virtualmente clasificada a los Juegos Olímpicos de Tokio 2021, pues de acuerdo al ranking mundial es sexta, cuando el criterio para clasificar es estar entre las primeras ocho.

Su última competencia oficial, celebrada el pasado mes de marzo en Cuba, confirmó su gran nivel con tres medallas de oro que la colocan no sólo como la mejor de México en su categoría, sino entre las mejores del mundo y hoy sólo está a la espera de la buena noticia de la confirmación de la Federación Internacional de Levantamiento de Pesas para sellar el pase a Tokio para México.

De hecho, Aremi bien podría haber estado en estos momentos afinando su preparación para los Juegos Olímpicos de verano de 2020, los cuales fueron aplazados para el próximo año por el coronavirus, a la espera de que la normalidad vuelva al mundo y el certamen no sea cancelado en definitiva, una posibilidad que aunque es remota, está entre las opciones del Comité Olímpico Internacional (COI) para salvaguardar a los atletas.  

Su evolución

Aremi Fuentes compite en la categoría de menos de 76 kilogramos y cuenta con sólidos registros en sus pruebas, con una marca actual de 114 kilos en el arranque y 140 kilos en envión.

Su mayor evolución hacia estos logros se dio desde hace siete años, cuando se fue a radicar al poblado de Guadalupe Victoria en Mexicali, Baja California, en busca de más apoyos para lograr su sueño de ir a Juegos Olímpicos.  

La atleta “cachanilla” de adopción se ha mostrado orgullosa de poder continuar sus sueños en el norte del país de la mano de su entrenador José Manuel Zayas Flores, a quien conoció en los Juegos Olímpicos de la Juventud en Singapur -donde obtuvo bronce- y con quien tiempo después contactó para gestionar su llegada a tierras bajacalifornianas.

Entre los logros más importantes de la chiapaneca está la plata en los Juegos Panamericanos de Lima, así como un tercer lugar y dos cuartos en Campeonatos Mundiales celebrados en 2017 y 2019.

De momento y ante la actual contingencia, la atleta chiapaneca está entrenando en casa, con asesoría a distancia de su entrenador, con quien se reúne para practicar un par de ocasiones por semana (con todas las medidas preventivas), a la espera de que pase la actual contingencia del coronavirus y pueda volver a sus prácticas normales en el Centro de Alto Rendimiento de Mexicali.