A Elizabeth Álvarez no le cae bien su esposo

Los escándalos que rodean a Jorge Salinas no cesa. Cuando el público y la prensa parecían haber olvidado la supuesta infidelidad que cometió con su nutrióloga, el nombre del actor vuelve a sonar, luego de que llamara “mugrosos” y “muertos de hambre” a algunas reporteras y reporteros, por lo que su esposa Elizabeth Álvarez fue cuestionada acerca de qué opinaba de este comportamiento, mismo del que se deslindó, asegurando que él y solo él debe responsabilizarse de sus actos.

Todo comenzó cuando una revista de circulación nacional publicó imágenes en las que el actor aparecía besando a una mujer que no era su esposa, la cual fue identificada como Anna Paula Castillo, quien se convirtió en su nutrióloga luego de que el médico de cabecera de Salinas le recomendó bajar de peso, derivado de los severos problemas que tuvo en la columna vertebral.

Fue entonces que Carrillo y Salinas entablaron una relación profesional, según llegó a contar la especialista en su momento, pero esto provocó que el famoso tratara de seducirla, siendo el beso captado por la revista de espectáculos el primer intento que el actor hizo para demostrarle que se sentía atraído por ella. A partir de ahí, la insistencia de los medios de que él les concediera una declaración fue constate, sobre todo porque la presunta infidelidad ponía en riesgo su relación de más de una década de matrimonio con la actriz Elizabeth Álvarez.

Mientras las y los reporteros seguían preguntándole acerca del asunto, a sabiendas de que el actor ya había precisado que sería un tema del que no volvería a hablar, después de asegurar que los rumores no eran más que mentiras infundadas, el actor comenzó a evitar las cámaras y micrófonos, aunque al participar, en nuevos proyectos televisivos volvía a dar conferencias de prensa.

En un evento reciente, Salinas fue puntual al aclarar que no todas y todos los periodistas se conducían igual, pero usó expresiones como “mugrosos” y “muertos de hambre”, lo que molestó al gremio, con el que posteriormente volvería a vivir un desencuentro cuando un reportero que lo entrevistaba le tocó el brazo, gesto que desató la ira de Salinas.

Por todo esto, fue inevitable que, cuando los mismos medios vieron a su esposa Elizabeth en la alfombra roja de Vaselina, le preguntaran acerca de su opinión sobre los comportamientos que Jorge había adoptado en los últimos días y, a pesar de que en la época en que ocurrió lo de la supuesta infidelidad la actriz lo defendió a capa y espada, asegurando que disfrutaban de un matrimonio sólido, cimentando por una familia muy unida, en esta ocasión se deslindó del actuar de Salinas. “Yo creo que lo que quieran preguntar a él sigan preguntándoselo a él, lo que me quieras preguntar a mí, feliz de respondértelo”, declaró.

Además, la actriz dejó entrever que no estaba de acuerdo con algunos de los comportamientos que Jorge tiene, debido a que es consciente de lo importante que es el respeto y relacionarse armoniosamente con a la prensa.