Julieta Egurrola recuerda cómo, en los 80, comenzó a hacer ruido para mirar hacia las personas desaparecidas. Esa preocupación se la inculcó a sus hijos, Natalia Beristáin y Pedro de Tavira, a quienes también les heredó la vena artística; hoy son directora y actor de cine, respectivamente.
Hace un año la actriz vio consolidada su labor cuando su hija Natalia decidió dirigir Ruido, una protesta fílmica contra este fenómeno que entre 1962 y el 2 de agosto del 2023 reportó la ausencia de 290 mil 824 personas. Hoy, la cinta está nominada al premio Ariel, el máximo reconocimiento del cine mexicano; Julieta como actriz y Natalia como directora también compiten. “La desaparición forzada es un tema que particularmente nos interesaba desde siempre, especialmente Natalia porque él (Pedro) era muy chiquito. Mis hijos mamaron el activismo, mamaron el cine y yo apoyo las causas en contra de las injusticias; era lo que se veía en casa”, cuenta.
La nominación la recibe como una “oportunidad de seguir haciendo ruido” por esta causa, pero ahora respaldada por sus hijos.