Amaia Montero, exvocalista de La Oreja de Van Gogh, anunció a principios de octubre que volvía a la música después de cuatro años de pausa. Sin embargo, días más tarde, hizo saltar todas las alarmas con unas publicaciones en Instagram en la que se podía observar desmejorada. Además, junto a esas fotografías escribió: “Si la esperanza es lo último que muere y todavía no la he perdido, de qué me sirve la vida”.

Un mes después, Montero se ha convertido en una de las protagonistas más importantes de la crónica rosa al reaparecer tras ser dada de alta de una clínica de Navarra (Pamplona), a donde ingresó para recuperarse de una dolencia que aún no ha sido revelada.

Luego de varias semanas en el mencionado centro, la cantante fue vista saliendo de las inmediaciones con un atuendo cómodo, mientras cargaba las maletas en un vehículo.