Ana Serradilla

Ana Isabel Serradilla García, conocida simplemente como Ana Serradilla en el mundo artístico, es una actriz nacida en la Ciudad de México, en 1978. Dio inicio a su carrera en la televisión haciendo comerciales y siendo parte de la campaña mexicana Vive sin Drogas.

Mientras estudiaba diseño gráfico en el Universidad Intercontinental, fue invitada por la escuela de televisión azteca en 1998, para perfeccionar sus dotes como actriz, por tal motivo solo pudo ser parte de la educación superior por cinco meses.

Muy asidua a sus clases de actuación en la mencionada escuela de arte dramático, Ana tampoco pudo seguir los estudios del todo, porque al poco tiempo de convertirse en alumna fue descubierta y quedó seleccionada para hacer el rol principal de Chiquititas, una producción de Azteca y Telefe en Argentina.

Luego de hacer la telenovela en la capital Argentina, Ana regresa a su país donde nuevamente retoma sus clases de actuación en el Cefac. En esta oportunidad sus maestros serían Héctor Mendoza y Raúl Quintanilla. Seleccionada nuevamente para participar en la telenovela mexicana La vida en el espejo, compartió su tiempo en los sets de grabación y sus clases. En esta producción, Ana da vida a Paulita, pareja del actor Diego Luna.

Tiempo después, tendría una actuación especial en la serie Embrújame, versión mexicana de la recordada serie norteamericana Bewitched, interpretada por la desaparecida Elizabeth Montgomery. Sería la actriz protagónica de las series Lo que callamos las mujeres y Momento de decisión.

Ana Serradilla también ha tenido algunas participaciones en la pantalla grande. Hizo su debut con el cortometraje de Tomás Farkas El duende del reloj, en 1999, premiado y reconocido como mejor cortometraje en el Festival de cine de Milán. Recibió una nominación como revelación femenina en las Diosas de Plata por su protagónico en el largometraje Un mundo raro.

Entre setiembre de 2003 y marzo de 2004 se hace integrante del elenco de la telenovela Mirada de mujer, el regreso, en el papel de Carolina y compartiendo créditos con Angélica Aragón, Ari Telch, Evangelina Elizondo y Mauricio Ochman, entre otros.

Varios proyectos más la llevaron a participar en 2006 en Campeones, en el rol de Isabel Chaparro. Ese mismo año aparece en el filme Cansada de besar sapos. Esta producción fue catalogada como una de las mejores comedias contemporáneas hechas en México.

Un año después trabaja en la película que dirige Gael García Bernal, Déficit, y para 2008 participa en la serie Amas de casa desesperadas, versión en español de Desperate housewives en el papel de Gabriela Solís. En el 2010 trabajo en la serie de TV Azteca titulada Drenaje profundo, haciendo el papel de Lucía Santos.

El 2012 se podría resumir con una sola palabra, “éxito”. Ana inauguraba el año con alegrías en forma de premios. Si Pastorela arrasó en los premios Ariel, La otra familia lo hizo en los Canacine, donde ella recibió el premio a mejor actriz.

En 2013 Ana ganaba la Diosa de Plata a la mejor actriz por su Miranda en Luna escondida, papel que le ha seguido dando muchas alegrías durante este año. Por fin se estrenaban en cines comerciales las películas Espacio interior y Preludio, aplaudidas ampliamente por la crítica.

Volvió a la televisión con la serie Alguien más, donde da vida, durante 13 capítulos, a Irene. Una trama sobre la crisis de los 30 y los problemas de los jóvenes de esa edad. Terminaría el año con el rodaje de Griselda Blanco, La Viuda Negra. Una ambiciosa historia rodada en Nueva York y Colombia, en al que Ana da vida a una narcotraficante.

El éxito de esta producción fue lo que marcó el 2014. La serie se emitió en multitud de países de Latinoamérica con igual triunfo en todos ellos. Tras la promoción de la misma, Ana se tomaría un pequeño descanso y solo participó en una nueva campaña de Fitness de Nestlé sobre el cáncer de mama. Hacia la mitad final del año, Ana regresó a Colombia para rodar La Esquina del Diablo, que se estrenó a principios de 2015. En lo personal, terminaba su relación con el productor Héctor Samperio y poco después comenzaba un romance con el actor Julián Román, compañero de reparto en La Viuda Negra.

Tras volver a interpretar a Griselda Blanco en la segunda temporada, durante 2016, surgieron nuevos proyectos para el cine, como la comedia Ni un minuto que perder y el thriller de acción Welcome to Acapulco.