Charlarán sobre la mujer en la escena latinoamericana
Damaris Disner es autora de las obras La siguiente esquina, Sirena del Desierto y Leitmotiv. Cortesía

La dramaturga Damaris Disner estará presentando este 1 de octubre el libro La mujer en la escena teatral latinoamericana de cara al siglo XXI, memorias de dos encuentros 2015-2016, a través de las redes sociales.

La cita es a las 13: horas de este jueves en el perfil del Facebook Fenaloficial o a través de la plataforma de la Feria Nacional del Libro de León.

La hija del artista Rodolfo Disner explicó que estará al lado de Ana Várguez, con el fin de presentar el citado volumen, el cual reúne 34 textos de mujeres creadoras de la escena teatral que se presentaron en el encuentro internacional homónimo en la ciudad de Mérida, Yucatán.

Agrega que se trata de una edición que le complace mucho, ya que también le servirá para retomar su editorial Azul Turquesa, además de que es un trabajo que se llevó a cabo en conjunto con El Globo Arte y Cultura, A. C., que dirige Ana Várguez.

¿Cómo surgió la iniciativa de presentar el libro? ¿Forma parte de algún programa o encuentro de alcance nacional?

Es parte de la Feria Nacional del Libro de León, en su edición número 31. Estaba prevista de forma presencial pero, por la pandemia, será virtual. Es un gran encuentro que reúne a escritores de la talla de Gioconda Belli, Liliana V. Blum, Rosa Montero, Cristina Rivera Garza, J.M.G. Le Clézio, Etgar Keret, por mencionar algunos a quienes admiro. Podré escucharlos, aunque ya no conocerlos personalmente; es de las cosas que extrañas de las ferias presenciales.

¿Qué nos puedes adelantar de La mujer en la escena teatral latinoamericana de cara al siglo XXI?

Que el libro se editó en marzo de 2017 y su vigencia es impresionante. Dramaturgas, directoras, productoras, actrices, gestoras culturales comparten sus vivencias, dando testimonio de las dificultades que enfrentaron para dedicarse a su pasión. Reflexiones sobre la creación de públicos, el mundo hostil que enfrenta la niñez, el teatro comunitario o el teatro como un espacio de creación e investigación escénica. Sin duda, contribuye al campo de la investigación teatral desde la voz de sus hacedoras y eso es un gran acierto.

¿Cuál crees que sea el papel de la mujer en la escena, pero hablando de Chiapas?

Es impresionante y grato como cada vez la escena teatral chiapaneca es protagonizada por mujeres. La Muestra Estatal de Teatro en su emisión 2019 tuvo en la mayoría de sus montajes la participación de dramaturgas y directoras.

¿Podrías mencionar algunos ejemplos de mujeres que estén moviendo la escena a nivel estatal?

Laura Jiménez Abud, dramaturga con obra premiada y con participaciones en las muestras estatal y nacional. Lupita Calvo y Rocío Acuña han publicado investigación teatral; ambas también dirigen.

¿Qué dramaturgas chiapanecas actuales te gustan?

Me gusta la poética de Laura Jiménez Abud y de Merly Macías.

Se dice que el teatro es el espejo de la sociedad. Entonces, ¿cómo representar la realidad?

Vivimos cada vez más a prisa y nuestro entorno se va reduciendo a lo que podemos hacer desde casa. Poco a poco, vamos integrándonos a una nueva normalidad que no deja de ser incierta. Considero también importante tomar en cuenta el público al cual va dirigido nuestro proceso creativo. El teatro dirigido a NNA (niños, niñas y adolescentes) debe ser compartido desde una mirada emotiva, reflexiva y empática.

Sin duda, el autoconocimiento y la expresión propia han sido marcados desde el confinamiento; el arte y la cultura serán un reflejo de la evolución creativa dirigida al bien común.

¿Qué opinas de las charlas culturales, entrevistas y encuentros con creadores que últimamente se han estado realizando a través de redes sociales?

Considero que son necesarias para continuar generando reflexión, la conversación infinita a la que se refieren los investigadores teatrales Jorge Dubatti y Didanwy Kent. Los diagnósticos sobre el impacto del covid-19 en la comunidad cultural, realizados por la UNAM y el movimiento nacional NVDA, reflejaron que fue afectada en su capacidad de crear. Creo que al inicio nos pasó a la mayoría, pero con el paso de las semanas, el poder de la resiliencia se hizo presente.

El detenimiento físico, económico y social que generó la pandemia también provocó una mayor actividad creativa. La necesidad de crear aun en confinamiento nos hizo ver hacia lo interno para salvaguardar nuestra necesidad de ser escuchadas.

Creo que también se ha ganado público. Personas que nunca habían asistido a una obra de teatro, a alguna presentación de libro o conferencia, ahora pueden hacerlo desde la comodidad de su casa sin sentirse juzgadas o con tiempo y dinero limitados para acudir.