No usan capa ni armas poderosas; tampoco vuelan y menos se cuelgan de grandes edificios, pero Ludwika Paleta, Luis Gerardo Méndez y Guillermo Villegas pueden convertirse en héroes del cine nacional en lo que resta del año, si es que con sus nuevas apuestas fílmicas logran superar en conjunto 3 millones de espectadores en salas.
El número significaría, por sí solo, igualar lo alcanzado entre septiembre y diciembre de 2024; pero, como aquella cifra ya había quedado casi un millón de boletos abajo frente a 2023 y 2022 en el mismo periodo, cualquier resultado menor marcaría un retroceso. Los cuatro son las caras más mediáticas en las películas locales que, a partir del 4 de septiembre, buscarán atraer al público al cine.
De acuerdo con un sondeo entre distribuidores, hay hasta ahora una decena de títulos anunciados para este cuatrimestre final (cifra que puede crecer), en los que una tercera parte son comedia y otra similar de drama; hay una animación en stop motion y otra de terror, la restante es una suerte de farsa.
Ninguno de los actores mediáticos está en más de una historia, y tampoco aparece nadie de la familia Derbez. Quedan rostros conocidos como Manuel García Rulfo (Jurassic Park) en Una historia de amor y guerra, y Mariané Cartas (Las Bravas F. C.) en De qué manera te olvido; además, se suman algunos nuevos, como dos pequeños en la cinta No dejes a los niños solos.
Grandes títulos
La cifra mágica suena fácil, pero en el camino ya están afilando sus garras grandes títulos esperados, como las secuelas de Teléfono negro y Mortal Kombat, ambas para octubre; Wicked: por siempre, para noviembre y la nueva entrega de Avatar, en diciembre.
¿Un ejemplo cercano? Cuando salga la producción independiente Érase una vez en un ring, con Luis Alberti, así como Leonora, con Luis Gerardo Méndez, también se lanzará El conjuro 4.
Una semana después, el 11, cuando Dreams, de Michel Franco con Jessica Chastain (Interestelar) vea la luz, la estará esperando Demon Slayer: el castillo infinito, cuya preventa hizo caer a las plataformas digitales de las cadenas comerciales mexicanas.
Érase una vez en un ring, acerca de un luchador que tras sufrir problemas de salud debe alejarse del cuadrilátero, saldrá con apenas 50 pantallas, cantidad ínfima en comparación con El conjuro, del que se espera no salga con menos 2 mil. “La distribución la estamos haciendo nosotros directamente, cuando hay pocos recursos buscas alternativas. Aquí lo que queremos es generar una experiencia completa con el espectador, quizá hacer algunas activaciones en algunos cines, no sé todavía, pero buscarle para que la gente vaya”, comenta José Medina, director del filme.
Del ramillete de apuestas nacionales dos podrían rivalizar con los grandes estudios, por el respaldo que tendrán: Autos, mota y rocanrol, con Alejandro Speitzer y Emiliano Zurita, y Yo soy Frankelda, esta última en stop motion y anunciada tentativamente para el otoño.
Paleta llegaría en noviembre con el drama Después, sobre una madre que pierde a su hijo, mismo día que Un buen ladrón, con Channing Tatum; mientras que Villegas con la comedia De qué manera te olvido arribaría en diciembre, una semana después que Five nights at Freddy’s y al parejo que Noche de paz, noche de horror.
Casos especiales serán las animaciones Batman Azteca: choque de imperios, primera colaboración entre Warner Bros. y la compañía mexicana Ánima Estudios, pues trae consigo el crédito de un personaje mundial, así como Zoopocalipsis, que, si bien no es una producción mexicana, sí tiene un director connacional detrás de esta, Rodrigo Pérez Castro, que ha hecho carrera en el extranjero.
Optimismo de la Canacine
Hasta junio pasado la Cámara Nacional de la Industria Cinematográfica (Canacine) preveía un buen cierre de año para las películas nacionales, pues aunque con menos estrenos hasta ese momento con respecto a 2024 (57 contra 50), arrojaba mejores resultados teniendo cerca de 5 % del mercado, un punto porcentual más que en el mismo semestre del año pasado.
Mesa de regalos, con los actores Cassandra Sánchez Navarro y José Eduardo Derbez, ostenta hasta ahora el primer sitio con 2 millones de asistentes (en números redondos), seguida por las comedias Qué huevos, Sofía y la recién estrenada Mirreyes vs Godínez: Las Vegas, ambas con alrededor de 700 mil boletos vendidos. “Creemos que será un buen año para el cine mexicano, va creciendo y vienen estrenos importantes”, dijo Mauricio Durán, presidente de la Cámara.