San Pedro Tapanatepec, Oaxaca, fue una de las localidades afectadas por el sismo de 8.2 en escala Richter que ocurrió en septiembre de 2017. Cuatro años después de aquel suceso, continúan los trabajos de rehabilitación en este municipio colindante con el estado de Chiapas.
El 10 de septiembre, Ruffo Eder Soriano González, presidente de San Pedro Tapanatepec encabezó la inauguración del centro histórico de esa cabecera municipal que fue destruida por los eventos sísmicos. Aunado a esto, el edil develó dos murales creados con piedra cantera por el artista José Luis García.
La primera obra, titulada El cortador de mango, hacer referencia a la principal actividad económica de este municipio y con la cual se sostienen el 90 por ciento de las familias tapanenses. Al respecto, señalan que Tapanepec es el principal productor de mango en el estado y se encuentra entre los 10 primeros a nivel nacional, logrando recaudar cerca de 23 millones de dólares al año.
En tanto, la segunda lleva por nombre La fundación de San Pedro Tapanatepec y representa la leyenda de este pueblo oaxaqueño que surgió luego de la aparición de una imagen. “Con la llegada de los españoles, los lugareños vivían en un sitio que se llamaba Pueblo Viejo, que estaba en uno de los cerros aledaños a lo que hoy es la cabecera municipal, hasta que un día un leñador encontró en las márgenes del río Novillero un burrito (asno) que tenía un lienzo en su espalda con una imagen, por lo que rápidamente lo llevó con las autoridades eclesiásticas, quienes indicaron que debía construirse una iglesia en honor a San Pedro porque era el santo que estaba plasmado en dicho lienzo”, detallan.
Los murales tienen una dimensión de 7 metros de alto por 6 de ancho. Fueron hechos spor José Luis García, originario de Huajuapan de León y quien cedió los derechos de la obra a un grupo de ciudadanos para conservación del patrimonio cultural. Destacaron también que Tapanetepec pertenece al grupo étnico zoque, por lo que el municipio tiene un destacada participación en la fiesta de la Guelaguetza.