Con la puesta en escena Cronotropo, el grupo Telar Teatro, integrado por los actores Carlos Ariosto y Ulises Soto, Darwin Castillo como director y Guillermo Ruiz Long en la música, planea llegar a las 50 representaciones del texto de la dramaturga Laura Jiménez Abud.
Tras bambalinas, después de haber presentado la puesta en escena como parte de los festejos por el Día Internacional del Teatro, Carlos y Ulises hablaron sobre este proyecto que planean concretarlo en futuras fechas y el cual pretenden montar en todos los espacios teatrales posibles.
Pese a que la obra fue la ganadora de la Muestra Estatal de Teatro en el 2018 y posteriormente de la Muestra Regional Zona Sur del Forcazs, y fue parte de la Muestra Nacional de Teatro en la Ciudad de México, Carlos dice que son pocas las veces que han podido presentarla, por lo que aún hay un largo camino para llegar a la meta de las 50 representaciones.
Carlos Ariosto contó que en la temporada de estreno fueron diez funciones las que dieron en el espacio Telar Teatro, después se fueron al Festival de Teatro Independiente en Chetumal y al Festival de Teatro Ruido, luego llegaron las funciones en las Muestras de Teatro estatal, regional y nacional, seguidas de las del Día del Actor, y por último tuvieron 9 funciones más en el Festival Teatro entre Cuatro, para llegar a un total de 28 representaciones.
Puntualizó que aún tienen previsto realizar una nueva temporada y cumplir con la serie de funciones que establece la Muestra Regional en los estados que la conforman.
Agregaron que están de acuerdo con llevar la obra a otros espacios teatrales autogestivos en la capital chiapaneca para que el público asiduo a esos lugares pueda conocer el trabajo de distintos grupos escénicos.
“La idea es probar distintos públicos y espacios para empezar a hacer otro proceso de enriquecimiento y de alternativas”, argumenta Carlos, mientras que Ulises destaca que “afortunadamente, cada espacio tiene sus públicos asiduos y es bueno poder hacer comunidad compartiendo lo que saben hacer, sin que esto se conviertan en pequeños cotos sino que todos estén en favor de promover la actividad teatral”.
Experimento
La puesta en escena Cronotropo había sido presentada en una especie de teatro íntimo que permite un mayor acercamiento con el desarrollo de la escena; sin embargo, para esta última función los actores decidieron realizarla de una forma más convencional; es decir, dejando que el público observara desde la butaca, sin subirse al escenario como en las anteriores funciones.
Ante esta nueva propuesta, Ulises contó que la obra tiene diversas perspectivas para las presentaciones, y son consientes de que no siempre pueden mantener el formato de teatro íntimo en los diferentes espacios.
También dijo que esto obedece a una acción natural de experimentar con la puesta en escena y de utilizar de mejor manera los espacios más amplios como el Teatro de la Ciudad.
Por su parte, Carlos Ariosto aseguró que son experiencias diferentes y muy enriquecedoras, aunque en lo personal prefiere el teatro íntimo, que es el formato en el nació la obra Cronotropo, pero añadió que estos cambios también permiten llegar a nuevos públicos que gustan de ir a espacios como el Emilio Rabasa.
Al cuestionar a Ulises Soto sobre si las actividades realizadas por el Día Internacional del Teatro con las “Esquinas teatrales” y las funciones en el recinto teatral eran generadoras de nuevo público, expresó que no tiene evidencia de ello pero tampoco tiene dudas.