Eraclio Zepeda Ramos (24 de marzo de 1937-17 de septiembre de 2015) es uno de los escritores chiapanecos con mayor reconocimiento en toda la República Mexicana. Es mayormente conocido por sus cuentos, aunque también exploró otros géneros literarios como la poesía, la novela y la crónica. Fue integrante del grupo literario La Espiga Amotinada, junto a los poetas Óscar Oliva, Jaime Bañuelos, Jaime Labastida y Jaime Agusto Shelley.
El oriundo de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, también exploró otros géneros como la novela histórica, con libros como Las grandes lluvias, Tocar el fuego, Sobre esta tierra y Viento del siglo, que son considerados como los últimos que publicó en vida. Sin embargo, el Consejo Estatal para las Culturas y las Artes de Chiapas, a través de la Dirección de Publicaciones, publicó en marzo de 2015 la antología Cuentos y relatos, que reúne algunos textos del escritor tuxtleco.
La obra fue un homenaje que la institución cultural, dirigida en ese entonces por Juan Carlos Cal y Mayor Franco, le hizo al autor de Ocupación de la palabra, y empieza con tres cuentos (“Benzulul”, “No se asombre, sargento” y “Patrocinio Tipá”), los cuales se publicaron originalmente en 1959 bajo el título de Benzulul.
Saúl Juárez, quien escribe el prólogo del citado libro, opina que Eraclio nació literalmente con una obra madura, a pesar de que la escribió cuando solamente tenía 20 años de edad, y añade que Benzulul se convirtió en una de las propuestas más destacadas y novedosas en torno al temas de los indígenas.
También se incluyen las narraciones “El muro”, “La señora O’Connor”, “Lidia Petrovna” y “Asalto nocturno”, que fueron publicados en Asalto nocturno, por el sello Joaquín Mortiz, en 1975, luego de ser merecedor del Premio Nacional de Cuento en 1974.
Al respecto, Juárez manifiesta que dicho trabajo “ilustra de manera contundente cómo un narrador debe escribir un cuento”. Destaca que es la obra cuentística más lograda de Eraclio Zepeda, “y uno de los libros de narrativa de mayor relevancia del siglo XX”.
Cuentos y relatos contiene también un texto inédito del escritor chiapaneco, titulado “Cosas de niños”, para cerrar con tres cuentos más que se desprenden de Horas de vuelo: “El vuelo del tepezcluinte”, “Primer bombardeo en Chiapas” y “Subida al cielo”.
El autor del prólogo puntualiza que “el sello aquí es la inventiva y una creatividad siempre juguetona con constantes guiños al lector. Son cuentos de la factura madura que buscan la amenidad utilizando la sorpresa como un recurso eficiente”.
El libro cierra con los fragmentos dieciocho y veintitrés de la novela Tocar el fuego.