El colectivo Normalizando la Lactancia Materna en México y el centro de maternidad Luperca denunciaron que el 19 de noviembre después de mediodía una mujer que amamantaba a su hija en las instalaciones del Museo de Arte Moderno (MAM) fue retirada por personal de seguridad, bajo el argumento de que alimentar a su bebé dentro de las instalaciones estaba prohibido.

A través de Instagram, la organización hizo pública su denuncia con una carta dirigida al MAM en la que explicaron lo sucedido y exigieron una respuesta del recinto. Señalaron que personal de seguridad argumentó que estaba prohibido el consumo de alimentos y bebidas en las salas y que le dijeron a la mujer que en el sexto punto del reglamento se lee: “Le rogamos no consumir alimentos o bebidas al interior del museo. Así como no alimentar a los niños dentro de las salas, incluyendo el biberón”.

El grupo argumentó a su vez que en el tercer párrafo del 4° artículo constitucional dice: “Toda persona tiene derecho a la alimentación nutritiva y suficiente y de calidad. El Estado lo garantizará”. Y recurrió al artículo 26 de La Ley de Cultura Cívica en el que se lee que “Condicionar, insultar o intimidar a la mujer que alimente a una persona lactante en el espacio público” forma parte de las infracciones contra la dignidad de las personas.

El museo, a través de un mensaje privado en Instagram —que algunos denunciantes compartieron—, reconoció que personal de seguridad malinterpretó el hecho y que la lactancia está permitida dentro de sus instalaciones. Además, en dicho mensaje se comprometió a continuar sensibilizando a su personal respecto al tema.

En el video de seguridad que envió el MAM a la organización se observa el momento en el que cuatro guardias de seguridad acompañan a la madre mientras consulta el reglamento del museo. De acuerdo con los denunciantes, aunque nunca llegaron al contacto físico con la mujer, el personal de seguridad fue grosero con ella.