Descubre las maravillas de Palenque

Camina por la misteriosa selva Lacandona, acompáñate de su gente y explora rincones de ensueño. Entra a una de las ciudades más interesante que la cultura maya ha dejado

¿Cómo llegar?

Autobús: ADO y OCC salen de San Cristóbal.

Avión: Interjet llega a Palenque.

Palenque

De gran extensión, con soberbios edificios y con un arte complejo y refinado, esta zona arqueológica fue una de las más grandiosas urbes mayas y su florecimiento entre los años 600 y 900 d. C. fue parte del auge del periodo Clásico tanto maya como mesoamericano en general.Museo Alberto Ruz Lhuillier

El museo lleva el nombre del famoso arqueólogo de origen francés, Alberto Ruz Lhuillier, quien descubrió la tumba del Templo de las Inscripciones en Palenque donde actualmente se encuentran sus restos y cuya labor de investigación de esta zona es la más extensa.

Plaza del Artesano

Alrededor de 98 locales componen esta plaza en donde quedan reunidas las cosas que con maestría elaboran los artistas de la región. Aquí podrás encontrar desde piezas talladas en piedra y madera, hasta réplicas a escala de los sitios arqueológicos de alrededor. También hay objetos de cerámica, joyería de ámbar, cestas y textiles. Además de todo, aquí se pueden aprender de técnicas milenarias como el pirograbado, la lapidaria y el tejido chol.

Museo del Textil Lak Puj Kul

En maya significa “nuestra vestimenta”. Además de hallar una gran muestra de la producción textil chiapaneca, aquí podrás conocer la evolución de esa práctica artesanal. Aprende cómo se elaboran las telas, cómo se les da color, cómo las tejen y los distintos usos que pueden tener. Actualmente se conservan pocas muestras de textiles antiguos, pues son prendas elaboradas con fibras vegetales que tienden a descomponerse.

Iglesia de Santo Domingo de Guzmán

A un costado de la Plaza Principal se mira, tranquila, sencilla y de pequeñas dimensiones, la Iglesia de Santo Domingo de Guzmán. Luce un interior austero pero su altar principal está dedicado a Santo Domingo, patrono del pueblo desde que Palenque se volvió a catolicismo, tras la conquista española.

Selva Lacandona

Todas las imágenes legendarias de la Selva Lacandona son ciertas: las increíbles ruinas mayas devoradas por altísimos árboles, la fauna ruidosa y colorida, los ríos primorosos por su gran caudal o su tono azul turquesa, las lagunas como detenidas en el tiempo… El contorno de la Selva Lacandona es casi un rectángulo inclinado de noroeste a sureste, dibujado por las aguas de tres ríos tributarios del Usumacinta. Al sur corre el Jataté, la parte septentrional es del Lacanjá y el oriente del Lacantún. Dentro de esos límites queda la Reserva de la Biosfera Montes Azules.

Nada en la Cascada de Misol-Ha

Esta caída de agua de 30 metros de altura se ha convertido también en un clásico de los viajes a Palenque, tanto por su cercanía a la zona arqueológica, como por la serena armonía del lugar.

Refréscate con la cerveza artesanal Palenque

Durante tu recorrido por el pueblo, es una obligación que pruebes la Cerveza Artesanal Palenque elaborada cien por ciento a base de malta.

Acampa en Welib Ha

La carretera Fronteriza 307, esa que corre paralela al límite con Guatemala, conduce al primer regalo de la selva: la Cascada Welib-Ha. Si existe es gracias al río Chancalá que se mueve entre guarumbos y capulines buscando unirse con el gran Usumacinta. En algún momento su agua cae y lo hace desde una altura de ocho metros.