Descubren más cráneos humanos en Tenochtitlán
Vestigios encontrados por las excavaciones en el templo de Ehécatl y el tzompantli. Cortesía

Desde su hallazgo en 2015 hasta la fecha, en los vestigios del tzompantli de la gran Tenochtitlán se han encontrado 350 cráneos, informó el arqueólogo Eduardo Matos Moctezuma en un recorrido por la zona.

La estructura se ubica en la calle de Guatemala 24, en el Centro Histórico de la Ciudad de México. Los investigadores que continúan trabajando en el sitio estiman que podría haber muchos más restos humanos.

En el predio, que es propiedad privada, especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) localizaron hace dos años, a dos metros de profundidad, una plataforma rectangular con una longitud estimada en más de 34 metros, en la que había, en su núcleo, un elemento circular elaborado de cráneos humanos unidos con argamasa de cal, arena y gravilla de tezontle.

En agosto de 2015 Matos adelantó a La Jornada que era muy probable que la estructura correspondiera al gran Huey Tzompantli de la capital mexica, el altar donde se empalaban ante la vista pública las cabezas de quienes eran sacrificados para honrar a los dioses. Los datos recabados desde entonces confirman ahora ese supuesto.

Según los cronistas de la época, en la Gran Tenochtitlán había un tzompantli principal y otros pequeños. El muro de tezontle, con un recubrimiento de estuco y piso de lajas, está orientado de norte a sur, y a su alrededor había mandíbulas y fragmentos de cráneos dispersos.

Este tzompantli corresponde a la sexta etapa constructiva del Templo Mayor (1486-1502). Otra parte de esta estructura arquitectónica fue destruida en la época colonial por la construcción de un edificio ahora histórico, pero se pueden ver en el piso las huellas de los orificios de los postes o vigas de madera donde se insertaban los cráneos. Tales oquedades oscilan entre 25 y 30 centímetros de diámetro, separadas a una distancia de entre 60 y 80 cm.