En los meses de enero y febrero, Tsiskari, dúo que integran la soprano georgiana Sophie Gordeladze y el guitarrista mexicano Antonio López Palacios, ofrecerá su primera gira en México; esta tiene un concepto particular, ya que sus recitales serán en casas particulares, tal como se acostumbró con la música de salón durante los siglos XVIII y XIX.
El dúo, cuenta López Palacios, aprovecha las oportunidades que tiene para reunirse y agendar conciertos: “Sophie vive en Georgia. Por ahora estamos haciendo los conciertos en México porque ella ha estado viniendo. Ya tiene varios años que empezó a venir a México: vino a hacer La traviata, de Verdi, en Guanajuato; vino a hacer la Novena, de Beethoven, en el Degollado el año pasado; así fue como nos conocimos aquella vez que, precisamente, vino en 2024 al Festival de Mayo de Guadalajara”.
Precisaron que último encuentro fue el punto de partida para el nacimiento del dúo: primero trabajaron juntos en una serie de videos promocionales para anunciar el lanzamiento del dúo que, en otras palabras, se materializará en las siguientes semanas con su primera gira a través del territorio mexicano.
El guitarrista cuenta que cada uno trabaja su material de forma independiente: “Tras conocernos en mayo de 2024 grabamos seis videos en tres días. En esos tres días nos conocimos, digamos, el lunes y para el martes ya habíamos ensayado y grabado los videos; y el miércoles nos habíamos tomado las fotos antes de que ella regresara a Georgia”.
Añade que ha sido “una experiencia especial y satisfactoria en el sentido de saber que cuando hay un profesionalismo realmente puedes armar bien algo en poco tiempo. Disfrutamos enormemente hacer música juntos. Lo que quiero decir es sobre el nivel de profesionalismo tanto de ella como mío. Tenemos bastante bien preparada nuestra parte y, al reunirnos, nos ponernos de acuerdo en asuntos musicales de interpretación, tempo, dónde bajar y dónde subir. Ese tipo de cosas que se dan bastante rápido cuando hay un entendimiento musical”.
Una coincidencia que radica dice, aunque suene abstracto, en la visión y la honestidad musical. Sobre los recitales a la manera de la música de salón dice que está “trabajando en algo que no es ninguna novedad y ha pasado hace cientos de años: la música en casas. Con la diferencia de que antes, sobre todo en el periodo Barroco era un asunto de noblezas, de reyes y había muchas jerarquías. Aquí ya no hay eso, pero sí la experiencia musical de estar en una casa con una buena acústica y tener la experiencia de escuchar música, pero también la oportunidad posterior de convivir e intercambiar ideas con los mismos intérpretes y el público”.