El Convite llega a la Albania Alta
Tania Navarro, Julio Solís, María Elena Cruz y el chef Omar Velázquez, en la rueda de prensa. Darwin Mendoza

Tania Navarro, María Elena Cruz, Julio Solís y el chef Omar Velázquez fueron los encargados de presentar el Convite Cultural Al Son del Cañón, que se llevará a cabo en la colonia Albania Alta, de Tuxtla Gutiérrez.

En ese sentido, informaron que el primer día del encuentro será el próximo jueves 15 de febrero, en las instalaciones de la Biblioteca Pública Municipal Enoch Cancino Casahonda.

En su intervención, Julio Solís puntualizó que para la primera jornada tienen planeado realizar varias actividades que tendrán como invitados especiales a artistas locales y agentes culturales de la mencionada colonia.

“Este jueves es nuestra primera jornada y tendremos un taller de gastronomía típica, con un taller de tamalitos, y también tendremos una presentación artística a cargo de la compañera Karen Moreno, que será la agente que estará operando con nosotros” expresó.

Julio señaló que el nombre de Al Son del Cañón nace en referencia al más famoso atractivo natural del estado de Chiapas. Asimismo, detalló que las siguientes semanas habrá música, danza, pintura y poesía, además del fomento de la cultura zoque.

Por su parte, Tania Navarro dijo que este es el Convite de mayor duración, “ya que estaremos poco más 40 semanas trabajando en este lugar. Iniciamos este jueves 15 y pretendemos concluir hasta mediados de noviembre”.

Invitación

Añadió que los eventos están dirigidos a niñas, niños y jóvenes, para que las familias completas puedan acudir a la biblioteca Enoch Cancino Casahonda, todos los jueves de 17:00 a 19:00 horas.

Tania explicó que el Convite es un programa de la Secretaría de Cultura federal que ha estado presente en Chiapas desde hace tres años, en colonias de Tuxtla Gutiérrez y San Cristóbal de Las Casas. Destacó que la intención es llevar una cartelera cultural pensada en las necesidades de cada localidad.

Abundó que la integración del programa se basa en reuniones que sostienen con los habitantes de las colonias donde se realizarán las actividades. En dichos espacios se les pregunta a los participantes sobre cuáles son sus intereses y cómo es su vida cotidiana, y a partir de ahí se crea la cartelera.