El misticismo de Remedios Varo sigue vigente

La artista María de los Remedios Alicia Rodriga Varo y Uranga, mejor conocida como Remedios Varo, quien murió el 8 de octubre de 1963, se convirtió en una de las figuras de la pintura surrealista.

Actualmente en el Museo de Arte Moderno de la Ciudad de México se expone un íntimo y completo acervo de la artista con “Remedios Varo: apuntes y anécdotas de una colección”, exposición que permanecerá abierta al público hasta febrero de 2017.

La muestra que cuenta con 39 piezas como “La huida” y “Mujer saliendo del psicoanálisis”, entre otras, las cuales fueron donadas en 2002 por Walter Gruen y Anna Alexandra Varsoviano, de acuerdo con el recinto.

Nacida en Girona, España, el 16 de diciembre de 1908, pero nacionalizada mexicana en 1941, Varo desarrolló una obra en la que, de acuerdo con especialistas, giró en torno a un misticismo cargado de un toque de psicoanálisis, en la que destacan elementos soñadores y arquetípicos.

De acuerdo con datos del portal www.biografíasyvidas.com, Remedios Varo ingresó a la Academia de San Fernando en Madrid en 1924 en donde permaneció seis años y coincidió con personajes como Maruja Mallo (1902-1995) y Salvador Dalí (1904-1989).

La participación de la artista en la histórica “Exposición Logicofobista” desarrollada en Barcelona en 1936, con su obra “L´Agent Double”, fue un acontecimiento que la acercó a los componentes del surrealismo francés.

Durante la Guerra Civil (1936-1939) conoció al escritor francés Benjamin Péret (1899-1959) con quien contrajo matrimonio.

Fue también durante esta época y gracias a su entonces esposo, que la que la artista comenzó a involucrarse directamente con el movimiento surrealista, participando en reuniones y exposiciones.

Tras la invasión del ejército alemán, abandonaron París para instalarse en México en 1941 en donde se dedicó a trabajos de restauración de objetos prehispánicos e incluso diseño de vestuario y publicidad.

El sitio web del Museo Reina Sofía señaló que fue el uso del dibujo lo que caracteriza la obra de Varo durante su primera estancia en México, mostrando una nueva dimensión del surrealismo en la interpretación de la realidad desdoblada en distintas versiones, en una mezcla de ficción, sueño y premonición.

Amiga de personalidades como Diego Rivera (1886-1957), Frida Kahlo (1907-1954) y Leonora Carrington (1917-2011), Varo se separó de Péret en 1947 y con esto, la pintora pasó un tiempo en Venezuela pero regresó a México en 1953 y se casó con el político austriaco Walter Gruense (1914-2008).

Tras su regreso a México, la artista se reencontró con la pintura y comenzó a forjar el estilo personal que le ha valido el reconocimiento mundial.

Varo plasmó en varias de sus obras un interés por las ciencias ocultas y la alquimia, al mismo tiempo que estudió los avances científicos en las más diversas disciplinas como las matemáticas, astronomía, botánica y la biología.