Con un programa que incluirá invitados internacionales y el estreno mundial de piezas hechas ex profeso, la Orquesta Filarmónica de la Universidad Nacional Autónoma de México (OFUNAM) celebrará 80 años de su creación y la sala Nezahualcóyotl, 40, con recitales los días 19 y 20 de marzo.
El Programa Conmemorativo 80 años de la OFUNAM y 40 de la sala Nezahualcóyotl contará con la participación del director serbio Bojan Sudjic (1965), y tendrá el estreno mundial de “Ríos y vertientes”, pieza comisionada por la institución al compositor mexicano Samuel Zyman.
La Coordinación de Difusión Cultural de la UNAM expuso que en el festejo participará también el violinista ruso Vadim Repin (1971), quien fue ganador del Concurso Reina Elisabeth en Bruselas (1989), que ejecutará el “Concierto para violín no.1”, del compositor alemán Max Bruch (1838-1920).
También se tiene preparada la interpretación de “Obertura académica festiva”, de Johannes Brahms (1833-1897); el “Danzón no. 2” y “Goyas”, de Arturo Márquez (1950), en la sala Nezahualcóyotl del centro cultural Universitario.
La OFUNAM iniciará su Primera temporada regular los próximos 16 y 17 de enero, dirigido por Enrique Arturo Diemecke, y a lo largo de la misma cumplirá con siete programas que tendrán lugar los sábados y domingos, hasta el 13 de marzo. En ese lapso, el público podrá disfrutar la presencia de experimentados directores huéspedes, solistas nacionales e internacionales que interpretarán grandes obras musicales.
Para los conciertos de los días 6 y 7 de febrero, Difusión Cultural de la UNAM destacó que se contará con la participación del director huésped Iván López Reynoso, la soprano Gabriela Herrera, la mezzosoprano Guadalupe Paz, el bajo Alejandro López, el coro sinfónico Cantarte y el reconocido tenor internacional Javier Camarena.
Será en este concierto donde se estrenen en México la “Obertura de Ermione” y “El llanto de Armonía sobre la muerte de Orfeo” de Gioachino Rossini (1792-1868); y el estreno mundial de “Huésped de la aurora”, el 13 y 14 de febrero, obra del mexicano Jorge Torres-Sáenz, bajo la batuta del alemán Hansjörg Schellenberger.