La nueva edición del Festival Internacional de Cine en Guadalajara buscará dar otro paso hacia los números que tenían antes de la pandemia, desde la cual la asistencia ha disminuido en poco más del 50 por ciento.

Si en 2019, previo a la llegada del covid-19, se registraron 120 mil asistentes a los espacios físicos de exhibición, el año pasado se llegó a los 49 mil en todas sus secciones.

Estrella Araiza, directora del certamen, señala que esto obedece a una disminución en su número de sedes, sino a que cambiaron los hábitos de consumo, algo que han ido también registrando las grandes cadenas exhibidoras.

“Hay muchas personas que no quieren gastar 60 pesos (en el boleto), sí se ha modificado el consumo, pero entonces tendremos más cine gratuito, más cine al aire libres más espacios por la ciudad para ellas. Lo que estamos haciendo es una reflexión, ser sensibles, ya con esto pues irán personas por la calle caminando y de pronto verán una pantalla que está proyectando algo y se quedarán. Hace poco hicimos un experimento con ‘Mamma mía’ y hasta la gente bailaba”, comenta Araiza.

Consideró que, eventualmente, se irá llegando a números del pasado. Para la edición 39 del FICG (por sus siglas) se tendrán 180 producciones, entre corto y largometrajes, divididos en cerca de 300 proyecciones en más de 50 sedes.