A fines de 2019, Damián Alcázar dijo que en la cinta ¡Que viva México!, que entonces preparaba junto con el director Luis Estrada, a él se le vería como Los Tres Huastecos. ¿Serán tres personajes?, se le preguntó. “Nuestro objetivo a desmenuzar es el ciudadano intolerante, racista, envidioso, arribista, competitivo, en lugar de ser todo lo contrario y eso es lo que me jala del nuevo proyecto de Luis”, respondió sonriendo.

En la película de 1948, dirigida por Ismael Rodríguez, Pedro Infante interpretó a unos trillizos con destino distinto: el cura, el militar y el ladrón, quienes en la secuencia final incluso cantan juntos. Hoy las autoridades estatales de San Luis Potosí dieron a conocer aspectos de la cinta, que se rodó en la comunidad de Potrero, en Real del Catorce, lugar que durante la segunda mitad del siglo diecinueve fue bastión para la minería.

“Es sobre hacia dónde estamos yendo y que cada día se están haciendo las diferencias más profundas y graves, de este clima de confrontación, siendo una película crítica hacia todos, hacia el gobierno, hacia los políticos, hacia la sociedad, hacia mí, hacia ti”, dijo Estrada en su momento.

El rodaje, que concluyó el pasado viernes dejó, de acuerdo con las autoridades, una derrama económica de 20 millones de pesos. Potrero fue acondicionada como el lugar donde habita la familia protagonista. Joaquín Cosío, Ana Martin, Alfonso Herrera y Leticia Huijara forman parte del elenco de esta producción entre Bandidos Films y la plataforma de streaming Netflix.

La producción se estrenaría en 2022. “(La película) es hacia todos los que estamos en este tiempo, donde literalmente es hombres contra mujeres, blancos contras negros, ‘chairos’ contra ‘fifís’… No deja a títere con cabeza”, expresó el realizador.