Los maestros José Luis Castro Aguilar y Roberto Fuentes Cañizales impartirán el taller “La crónica en México”, a través de la plataforma de videollamadas Zoom. La cita es este 6 de enero del 2021 a las 17:00 horas. Los interesados pueden inscribirse enviando un mensaje que contenga sus datos personales al correo electrónico saramtz_@hotmail.com
El taller es avalado por la Asociación Nacional de Cronistas de Ciudades Mexicanas y el Consejo de la Crónica Municipal de Tuxtla Gutiérrez. El libro que servirá de guía para los cursantes es En busca de la crónica. Manual para la enseñanza de la crónica, escrito por el maestro Jose Luis Castro Aguilar y publicado por el sello León de la Rosa.
En entrevista con Castro Aguilar, expuso que al hacer una revisión bibliográfica a lo largo de su historia como género histórico, literario o periodístico, se encuentran grandes coincidencias en cuanto al contenido y a los diversos conceptos que la conforman.
Añadió que se puede llamar crónica a un texto que narra un hecho o suceso acontecido en un determinado tiempo, espacio o circunstancia, en el que participan uno o varios personajes. Otro de los elementos que resaltó fue que el objeto de estudio puede ser un hecho social aislado, una práctica cotidiana o bien actividades actuales de la sociedad.
Por otro lado, el maestro refirió que la crónica literaria como movimiento cultural apareció en Chiapas en 1951, fecha en que Mario Araujo Rodríguez publicó Los ríos de mi pueblo. Abundó que hasta antes de Mario Araujo, ningún otro autor había incursionado en la misma, ya que surge como un género híbrido de la historia y la literatura, por lo que se podría decir que está aún en pañales.
“En cambio, la crónica tradicional sí ha tenido algunos seguidores, entre los que destacan Fernando Castañón Gamboa, Prudencio Moscoso Pastrana, Antelmo Figueroa Pulido, Juan María Morales Avendaño, Manuel de Jesús Martínez Vázquez, Eliseo Mellanes Castellanos, Manuel Burguete Estrada, Enoch Cancino Casahonda, Fernán Pavía Farrera y Alberto Vargas Domínguez”, indicó.
Además, “los cronistas del pasado no hicieron escuela ni dieron lugar a la formación de corrientes literarias que fortalecieran y desarrollaran a la crónica como género histórico y literario; tampoco abrieron nuevas perspectivas para el ulterior crecimiento y desarrollo de la crónica tradicional”, dijo el maestro.