Desde sus primeros años, Iron Maiden se colocó como la banda estelar de la nueva ola del heavy metal británico gracias al éxito de Iron Maiden (1980) y Killers (1981), sus primeros discos.

Sin embargo, la obra maestra del grupo salió un 22 de marzo de 1982 cuando lanzaron The Number of the Beast, el cual presentaba a Bruce Dickinson como su nuevo vocalista luego de la salida de Paul Di’Anno debido a sus problemas con las drogas. Además es el último material que cuenta con Clive Burr, el baterista original del grupo.

Fue criticado por grupos conservadores ya que la banda fue considerada como satánica debido a la portada del disco en donde se puede ver a Eddie, la mascota del grupo, controlar a un demonio.

El álbum cuenta con varios temas que se volverían clásicos en los conciertos de Steve Harris y compañía, tales como la canción homónima al disco, la cual trata acerca de una persona que tiene una pesadilla en donde está en el infierno y observa actos demoniacos.