Esta encantadora joven llegó a la edad de las ilusiones y por este motivo sus papás le organizaron una hermosa fiesta en la que los invitados la pasaron de lo mejor con cada una de las sorpresas. Karen dio gracias a Dios por todas las bendiciones recibidas, en una emotiva ceremonia religiosa, para después trasladarse hasta un elegante salón donde se divirtió en compañía de sus amigos