Koons y su vida después del éxito
La obra Rabbit se vendió en 91 millones de dólares en la casa Christie’s, marcando así un récord en subastas para un artista vivo. Cortesía

“Después de las noticias del 15 de mayo (miércoles), mi vida es la misma, mi trabajo es el mismo”, dijo Jeff Koons, quien impuso un récord mundial para un artista vivo: Rabbit se vendió en 91 millones de dólares en la casa Christie’s. “Cuando hice ‘Rabbit’ (1986) solo me enfoqué en mis intereses. La verdadera recompensa es, por ejemplo, esta exhibición. Solo quiero estar en diálogo con otros artistas sobre lo que puede ser arte”, señaló.

Un cruce de miradas entre Koons y Marcel Duchamp, sin equivalencias fáciles ni “filias” —como precisó el curador Massimiliano Gioni—, es la propuesta de la exposición Apariencia desnuda, que el 19 de mayo abre al público el Museo Jumex, donde estará hasta el 29 de septiembre.

La exhibición, exclusiva del Museo Jumex, contiene 80 obras de 30 colecciones; se despliega por las galerías altas del recinto, la terraza y la entrada donde la inmensa Bailarina sentada se adivina a la distancia.

La curaduría planteó un juego de espejos entre los dos artistas con obras que ocupan una página en la historia del arte, como la serie completa de los ready-mades, de Duchamp, el más influyente creador del siglo XX. De Koons pueden verse, entre otras obras, Rabbit, Balloon Dog, Play-Doh, y piezas de series como Banality y Made in Heaven.

Identidad y #MeToo

Jeff Koons no abordó el tema de Donald Trump; a menudo reiteró ideas sobre la aceptación personal y de su propia historia, y los valores en los que cree: “A lo largo de la vida, aceptarse a uno mismo tiene relevancia y pienso en eso en diálogo con el arte y eso es el arte objetivo. Después de que aprendes a lidiar contigo mismo quieres salir y eso te lleva automáticamente al arte objetivo que es la aceptación”.

¿Qué significa Marcel Duchamp en su carrera y cómo ha cambiado ese significado?

El significado de Duchamp en mi carrera continúa, evoluciona y se redefine, pero de cierta forma siempre ha sido consistente. Su trabajo tiene un gran impacto porque siempre ha sido un símbolo de liberación, el ser capaz de colocar todo e incorporarlo, para un nuevo vocabulario. Su trabajo ha demostrado que si nos abrimos a nosotros mismos nos encontraremos con un vocabulario que nos abrirá el mundo. También imagina la identidad casi como un ready-made.

Después del movimiento #MeToo, ¿se ha sentido limitado a la hora de crear nuevas obras?

Creo que el mundo y el cómo lo vemos y lo entendemos siempre está cambiando. Movimientos maravillosos están iniciando y ahora criamos diferente a nuestros hijos y todos están comprendiendo lo que son los derechos. Estos movimientos son positivos. Respecto a Made in Heaven, mi exesposa (Cicciolina) siempre fue capaz de no sentir culpa ni vergüenza, esa era una de sus fortalezas.

¿Cree que el consumismo ha formado la identidad de su país?

Imagino que el consumismo participa, pero hay más cosas que forman la identidad, como los pensamientos y la educación. El hecho de que un individuo satisfaga sus necesidades es una referencia al consumismo.

¿Tiene algún interés de criticar el consumismo a través de su arte?

Creo que mi trabajo trata el deseo, de diferentes necesidades, del deseo de abundancia y de compartir; y si hablamos de esas necesidades, no hablamos de cosas superficiales, sino de trascendencia y cómo el deseo da trascendencia.

¿Qué opina sobre la idea de que usted es el nuevo Andy Warhol?

Siempre he pensado que Duchamp es el abuelo, Andy vendría siendo el padre y yo sería el nieto. Es un honor tener esta exhibición junto a Duchamp. Mi trabajo hace referencia a ellos y a otros artistas.