Con su audacia, el joven José Agustín llegó para cambiar la literatura mexicana. Sus lectores y seguidores lo recibían como a un ídolo de rock n’roll y con esa misma calidez fue despedido el autor de La tumba, quien falleció este martes, después de lidiar con la precaria salud que le dejó un accidente en 2009.

“Abrió la puerta y todos nos metimos a la fiesta”, es como el escritor Yuri Herrera condensa el impacto de la obra de Agustín en una publicación de la red social X.

Brenda Navarro, autora de Casas vacías, reveló que en los inicios de su carrera, aspiraba a hacer su propio “José Agustín style”, mientras que el escritor Juan Pablo Villalobos contó cómo el simple hecho de ver en su librero su ejemplar de Se está haciendo tarde era suficiente para no perder el ánimo ante el hecho de que aún no terminaba de escribir un libro.

Estos testimonios de escritores mexicanos contemporáneos son reflejo del impacto que ha tenido Agustín en nuevas generaciones. Emiliano Ruiz Parra, cronista y autor del prólogo del primero tomo de Tragicomedia mexicana de Agustín, destacó la audacia del escritor, una que no se había visto antes y que, asegura, tampoco se ha visto después.

Adaptación al cine

Cuando José Agustín supo que Gael García Bernal daría vida al protagonista de la versión cinematográfica de su novela Ciudades desiertas se puso contento. El actor de Y tu mamá también y Amores perros era el elegido para dar vida a Eligio, el joven que un día despierta solo para descubrir que su pareja lo abandonó para irse a EU, y decide emprender su búsqueda.

La cinta llegó a salas en 2016 con el nombre de Me estás matando, Susana, bajo la dirección de Roberto Sneider (Arráncame la vida), con la española Verónica Echegui en el papel coprotagónico. “Es muy buen actor, excelente presencia”, dijo a la prensa José Agustín en la premier del filme.

A pregunta expresa, afirmó nunca haber pensado en García Bernal para el papel. “Nunca me imaginé nada cuando hice a Eligio, pero, bueno, ya cuando vi que él lo iba a hacer, dije ‘perfecto’”, recalcó.

Me estás matando, Susana llegó a salas con la clasificación no restrictiva B-15, recomendable para mayores de 15 años, y recorrió algunos festivales de cine como el de Málaga.