LIBROS

Me pasa que encuentro títulos que me atrapan y desde un principio me indican que el libro que estoy por leer es tan bueno que necesito leerlo. La semana pasada caminaba por la biblioteca de mi universidad y encontré libros nuevos en los tan familiares estantes, y entre ellos había varios del recién fallecido Gabriel García Márquez. Escogí Del amor y otros demonios porque había oído hablar tanto de él y el título es tan enigmático y seductor que me obligó a solicitar su préstamo.

Del amor y otros demonios te envuelve en el ambiente que rodea a la pequeña Sierva María de todos Los Ángeles, hija del Marqués de Casalduero, una niña de doce años que durante toda su vida ha convivido con los esclavos africanos, abandonada de la atención de sus padres. Sierva María es mordida por un perro mientras camina por el mercado, y aunque al inicio el problema pasa desapercibido, luego se vuelve motivo de preocupación para el padre, pues el perro es sacrificado por tener rabia.

El Marqués decide hacerse cargo de Sierva María y sacarla del ambiente de esclavos, sin éxito alguno, pues la niña ha adoptado la cultura, lenguas y creencias paganas de los africanos. Ante los primeros síntomas de la rabia, el Marqués interna a Sierva María en el Convento de Santa Clara, donde es vista como poseída por el demonio. Sierva María tiene constantes explosiones en su comportamiento y no se lleva con nadie que no sea otra de las presas, Martina o cualquier esclava. El obispo ordena a Cayetano Delaura que inicie los procesos de exorcismo de Sierva María. Delaura, a pesar del comportamiento hostil de Sierva María, comienza a enamorarse enfermizamente de ella. Aun con la diferencia de edad (pues Cayetano tiene 36 años), Sierva María corresponde su amor. Llega a oídos del Marqués la relación que hay entre su hija y el sacerdote y se prohíbe su entrada al convento de las Clarisas. La niña ya entró en procesos de exorcismo, pero pasado un tiempo muere “de amor”, sin haber vuelto a ver a Delaura.

Leí el libro en poco tiempo porque García Márquez tiene esa característica de hacer sus historias adictivas, de esas que no se pueden soltar aun cuando tienes que ir a comer, hacer tareas o dormir. Me transportó inmediatamente al calor bochornoso del pueblo, a los olores que despiden las curaciones, hechizos y brebajes de los esclavos, a la amargura del corazón de Bernarda y a escuchar los alaridos de Sierva María cuando estuvo encerrada en el convento.

La gran duda que me mantuvo en vilo fue tratar de adivinar si Sierva María estaba endemoniada, tenía rabia o simplemente ganas de fastidiar a su familia. Llegué a mis conclusiones y creo que cada uno puede interpretar qué pasaba por la mente de Sierva María.

Del amor y otros demonios me dejó en shock porque es tan bueno que necesité dejar de leer otros textos un par de días para superarlo. Me brindó todo lo que esperaba: una historia diferente, descripciones meticulosas, diálogos precisos y un romance encantador.