The tragedy of Macbeth es un filme sobre el que se puede reflexionar en términos de representación en la pantalla. Basado en la obra de William Shakespeare, tiene entre sus protagonistas a actores de color como Denzel Washington y Corey Hawkins; el primero como el personaje central, y el segundo, como Macduff, quien termina por matar al protagonista.

Para Corey, es importante un espacio en la pantalla para diferentes tonos de piel, incluso más allá de los reconocimientos. “No somos tan escuchados especialmente como actores de color así que es importante tomar esta oportunidad, tener y crear trabajo más que querer ser reconocidos con una estatua dorada”, dice en entrevista.

“Es uno de los primeros filmes, sino es que el primero basado en Shakespeare, que realmente incluye a un elenco diverso y todavía tenemos mucho trabajo por hacer pero es literalmente una alegría ver y saber que un niño pequeño que vea la película un día en 10 o 50 años diga ‘me veo a mí mismo ahí’”, comentó.