El recién nacido tiene una piel diferente a nivel anatómico y fisiológico a la del adulto, sus cuidados deben ser especiales. ¡Aquí te damos los mejores consejos!
Tener cuidado con los productos aplicados
Debido a que la función de barrera de la piel no está completamente desarrollada en el lactante, las sustancias aplicadas localmente sobre la piel pueden penetrar de forma más intensa, alcanzando las capas más activas de la epidermis. De ahí que los preparados para uso externo deben administrarse y dosificarse de manera particularmente cuidadosa.
Preparados sin alcalinos para cambiar el pañal
Son apropiados los preparados sin alcalinos, enriquecidos con agentes aditivos grasos e indicados exclusivamente para el cuidado de las áreas especiales y delicadas del bebé
No se debe abusar de los antisépticos
LA AEP rechaza el abuso de antisépticos añadidos a los productos de limpieza. Su uso excesivo puede cambiar el ecosistema microbiológico normal de la piel, así como favorecer la proliferación de otros microorganismos. En el caso del alcohol, advierten de que pueden ser perjudiciales al absorberse, provocar quemaduras o cambios en el pH.
Huir de las altas y bajas temperaturas
La piel de los más pequeños agradece una temperatura templada. De otra forma, las temperaturas altas, pueden dar lugar a la hipertermia o sudamina, mientras las demasiado frías pueden favorecer la hipotermia o paniculitis.
Impedir la exposición al sol
Los bebés recién nacidos no deben exponerse al sol. Hasta los tres años deben evitar esta exposición directa. Además, recomienda salir al exterior con una protección frente a los nocivos rayos solares.
Limpiar con jabones neutros
Hay que tener en cuenta la delicadeza de la piel del pequeño que, en un principio, carece de flora bacteriana que le proteja y tiene la herida del cordón umbilical. No se puede emplear cualquier producto para limpiarle. Como su pH es ácido y varía entre 4,5 y 6 según las zonas, se han de evitar jabones alcalinos, que aumentan su pH, dando lugar a irritaciones e infecciones.
Emplear lociones humectantes después del baño
Al nacer, la piel suele estar seca y presentar descamación. Para evitar esta sequedad son útiles las lociones humectantes después del baño.
No es necesario el baño diario
Una duda común es si es necesario lavar todos los días al recién nacido. La Asociación Española de Pediatría (AEP) indica que no es necesario limpiar todas las zonas, ya que tienen mecanismos de autolimpieza.