México rendirá homenaje a Amalia Hernández
La coreógrafa Amalia Hernández. Cortesía

Amalia Hernández (1917-2000) hizo un homenaje a México a través de las coreografías que construyó y hoy son parte del repertorio del ballet folclórico que fundó y abrió las puertas de este país al mundo; ahora, su agrupación le rendirá tributo, informó su hija Amalia Viviana Basanta Hernández.

La directora artística del Ballet Folklórico de México de Amalia Hernández destacó que el reconocimiento a esta nación se mantiene a la largo del tiempo gracias a esta compañía que el próximo 6 de agosto arranca en el Auditorio Nacional una serie de festejos para homenajearla en el centenario de su nacimiento, que se cumplirá en 2017.

En entrevista, destacó que la vida evoluciona a gran velocidad y la gente pide más, por lo que para esta gala en el Auditorio, con la que arrancarán las actividades por el centenario de su madre, construyó la coreografía de “Danzón No. 2”, con la música de Arturo Márquez, quien dirigirá la obra con orquesta.

“Es una parte totalmente nueva para nosotros, porque finalmente es un danzón actual que no perdió nunca sus raíces. El maestro ha sabido plasmar nuestra cultura, traerla a nuestros días y poderla mostrar al mundo, por lo que creo que es una fiesta para nosotros poder estar con uno de los grandes músicos”, señaló.

Basanta Hernández recordó que su madre hizo de la compañía la inspiración para muchos otros que conformaron grupos a lo largo del país, no sólo es una cuestión de aprendizaje sino de creación, de hacer coreografía, conformar espectáculos y finalmente abrió las puertas de México al mundo en términos de la representación de la cultura.

“Como coreógrafa, creo que mi mamá fue una persona genial, en términos de poder absorber parte de la genética del país; ella le puso ballet a esas esencias para poder intervenir una cosa con diferentes técnicas, para mí ha sido un ejemplo”, aseguró.

Basanta, quien dirige la compañía México en Movimiento, recordó que su madre fue también su maestra en coreografía, lo que le permitió hacer el cuadro sinóptico con relación a esa parte de donde partía lo fundamental y luego el desarrollo de un proceso.

Porque la directora y coreógrafa Amalia Hernández (1917-2000), agregó su hija, inyectaba esa libertad al momento de bailar, porque en cada estado de la República Mexicana faltaba eso, como darle un sentido místico, tradicional, una fiesta patronal o una fiesta pagana, y les dio contenido, a través de temáticas como la Revolución Mexicana, una época específica de la historia de México.