Pedazos de papel de todos colores surcan el aire. El ambiente inundado del polvo blanco del talco deja a las personas con el cabello y la piel cenizos. El ruido ensordecedor de las matracas invita a vivir la fiesta de la carne en el marco del Carnaval Zoque Coiteco 2025.
Vestidos como diferentes personajes que conforman esta tradición, cientos caminan y deleitan la pupila de los curiosos que aguardan en las aceras para ver el desfile que se realiza el último domingo antes del Miércoles de Ceniza.
Este año es especial para miles de coitecos que por varios meses vivieron en carne propia diversos hechos delictivos de grupos antagónicos del crimen organizado que estaban disputándose la plaza. Ahora es diferente, los asistentes viven y se contagian de la alegría que brinda esta fiesta única que cada año atrae a visitantes de muchas partes del mundo.
Partiendo desde la iglesia de la Santísima Virgen de la Trinidad, las correlonas y los chores caminaron con dirección al parque central de Ocozocoautla, acompañados de música de marimba y diversas expresiones populares.
Al ritmo de “Jule, jule”, hasta el propio gobernador del estado, Eduardo Ramírez, llegó como uno chiapaneco más que buscaba vivir esta gran celebración de origen prehispánico. Hay referencias de que esta festividad es una de las más antiguas de todo México, y en la misma convergen elementos de varias culturas, entre estas las prehispánicas, la árabe y la española.
Como en otros pueblos de Chiapas, esta danza tiene un carácter ritual para pedir buenas y abundantes cosechas, además de rendir tributo al dios Sol.
Si bien las actividades comenzaron desde muy temprano, se dispersaron hasta otras zonas de la localidad conocidas como Cohuinás, donde las personas siguieron bailando al ritmo de la música tradicional.
Aquí les dejamos las siguientes fotografías captadas por Ciro Castillo, jefe de información de Cuarto Poder.