El doctor y abogado Marco Antonio Sarmiento Tovilla fue reconocido, por segunda ocasión, con el Premio Nacional Jurídico Fiscalista 2023 que otorga la Barra Nacional de Abogados Fiscalistas de México A.C.
Ante ello, el también maestro en derecho agradeció enormemente a la Barra Nacional de Abogados Fiscalistas por distinguirlo con este reconocimiento que otorgan a miembros honorables de la comunidad y próceres del derecho.
De acuerdo al reconocimiento que posa en una de las paredes de la oficina del abogado, el Premio Nacional Jurídico Fiscalista fue otorgado a Marco Antonio Sarmiento Tovilla “por haber contribuido a la comunidad jurídica nacional a través del impulso de la comunidad institucional, e impartición del conocimiento jurídico a nivel nacional que han causado un impacto positivo para México”.
En entrevista con el litigante expresó que la Barra Nacional de Abogados Fiscalistas es un organismo que agrupa a abogados, contadores y profesionistas interesados en el derecho fiscal y el derecho penal fiscal.
Indicó que el Premio lo recibió en la Ciudad de México durante una reunión que tuvo con los integrantes de la Barra a la que acudieron representantes de 27 estados de la República Mexicana, entre ellos Chiapas.
Añade que una las razones por las que cree que pudo haber sido elegido como merecedor de este premio fue por su participación directa con la Barra, derivado de algunos trabajos que se están realizando en estos momentos, “aunque esta vez no fui parte de la publicación de la revista que edita la Barra, estoy participando en la creación de una figura que se conoce como ‘ombudsman’ la cual solo existe a nivel federal y con la que queremos defender a la ciudadanía, tanto estatal como municipal, de todas aquellas acciones en las que las autoridades de manera indebida se realizan cobros”.
Aunque para su área es importante contar con reconocimientos, el doctor en derecho opinó que ni la titularidad de doctor ni la de maestro la utiliza, porque considera que los títulos no hacen más a una persona, “solamente son de carácter cultural, docente o profesional” explicó.
De momento Marco Antonio está lejos de la docencia, ya que tiene otras ocupaciones, sin embargo durante su etapa de maestro tuvo la oportunidad de haber conocido a personas que ahora están ocupando cargos importantes.
“De momento no puedo darles un consejo como tal, pero si les puedo repetir lo que siempre le decimos: ‘el derecho para nosotros no termina con la carrera, el derecho para la investigación y el estudio comienza con la carrera, por lo que no terminas nunca de estudiar y de trabajar’ parafraseando al célebre legista uruguayo Eduardo Juan Couture ‘el derecho se aprende estudiando, pero se ejerce pensando” dijo.
En ese sentido refiere que ha llevado casos que le han servido mucho para aprender, pero sin duda el que más le ha dado satisfacciones fue la defensa jurídica que se realizó en el caso de Aerocaribe 7223 que fue un accidente en Chulum Juárez. Relata que por cuestiones técnicas se le pidió que llevara la defensa, tanto del controlador aéreo de Villahermosa, Tabasco como de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.
Indica que parte del material que utilizó para la defensa se siguen utilizando y sirven para la enseñanza de escuelas a nivel internacional e inclusive, la Oasis que es un organismo de investigación de accidentes aéreos, entre otras más lo siguen replicando.
Por último dijo que le gustaría seguir aprendiendo algunas ramas del derecho o llevar otras especializaciones porque no hay edad ni tiempo límite para seguir aprendiendo.