El actor José Luis Reséndez está dando de qué hablar después de las fuertes y delicadas confesiones que hizo la presentadora Vanessa Arias, su expareja, quien confesó los maltratos físicos que vivió a su lado y la infidelidad que provocó su separación.

Reséndez participó en melodramas como La madrastra, Destilando amor, Camaleones, Corazón valiente, Dama y obrero y Señora Acero. Aunque desde hace varios años está alejado de la actuación, su rostro es un referente en las telenovelas mexicanas.

Polémica vida amorosa

José Luis Reséndez y la presentadora y actriz Vanessa Arias tuvieron una relación de cinco años que fueron un infierno para ella. En una reciente entrevista reveló lo complicado que fue salir de esa relación y tomar terapia durante mucho tiempo, pues fue víctima de violencia que nunca le reveló a nadie. Contó que a pesar de que Reséndez tenía adicción a las drogas, cuando la golpeaba lo hacía sobrio, se enojaba por “pequeñeces”. Reveló, por ejemplo, si llegaba cinco minutos tarde la cuestionaba sobre con quién estaba, si en Televisa saludaba a alguien, Reséndez se molestaba, pues su indicación era que volteara hacia abajo.

Recordó que cuando se cumplió un mes de haber comenzado a andar, él le pegó una cachetada porque llegó cinco minutos tarde. Ella lo perdonó porque pensó que la que estaba mal era ella. Después de varios episodios de violencia, ocurrió algo que hizo que Vanessa terminara la relación definitivamente. “Fue cuando lo caché con un travesti teniendo relaciones en mi casa, llegué un día antes de Culiacán y lo caché en mi casa, en mi cama, estaban desnudos. Me acuerdo que me fui donde estaba el centro de lavado, me hinqué y dije ‘Diosito, esto no está pasando’”, recordó.

“Tapadera”

Dos años después de ese episodio, Arias fue a un antro gay y se encontró con dicho travesti, quien le dijo que mantenía una relación con José Luis Reséndez desde dos años atrás. Admitió que ella misma se dio cuenta que José Luis era gay, pues se metió a su computadora y lo descubrió. Sin embargo, su amor propio era tan poco que prefería estar con él toda la vida aunque fuera gay, a no estar a su lado, estuvo dispuesta a ser su “tapadera” y lo único que le pedía era que la tratara bien, que no le pegara.

Lo que a Vanessa Arias le ayudó mucho fue mantenerse ocupada, además de tomar terapia y revelarle a su familia la verdad, aunque lo hizo tres años después.