¿Qué debe tener una silla para bebé?

??Es indispensable durante los primeros años del pequeño. Lo mejor sería tener dos: una en casa y otra, más ligera y manejable, para llevar en el coche. Deben ser prácticas y funcionales

Plegables o fijas

Las sillas fijas son una óptima solución si se dispone de espacio. Otras sillas se pueden plegar, ocupando, así, un espacio más reducido. Estas últimas se pueden guardar en cualquier rincón de la casa y transportar cómodamente en el coche.

Regulables

Muchos modelos disponen de un asiento regulable en altura, lo cual permite adaptarla a las necesidades del momento.

Transformables y evolutivas

En el mercado, también hay sillas pensadas para tener una utilidad cuando el niño crezca. Pueden transformarse, por ejemplo, en cómodas butaquitas, que el niño podrá utilizar durante mucho tiempo en su habitación, o en un práctico conjunto de mesa y silla. Otros modelos, como algunas sillas de madera, pueden regularse en altura, por lo que van creciendo con el niño hasta convertirse en sillas para adultos.

Con respaldo reclinable

Permite al niño adoptar una posición más cómoda, para que pueda descansar un ratito. Aunque sea cierto que, en la actualidad, las sillas son prácticas y cómodas, de cara a un correcto desarrollo del pequeño, los pediatras aconsejan no dejarlo durante más de media hora seguida en una posición que limite sus movimientos, pues, para desarrollarse, necesita ejercitar con plena libertad todas las partes de su cuerpo.

Con asiento amplio y cómodo

Los modelos más recientes, además de tener en cuenta el crecimiento del niño, ofrecen unos asientos amplios y cómodos, apropiados hasta el momento en el que el niño cumple tres o cuatro años de edad. También presentan diversos accesorios, como, por ejemplo, una sillita reductora, destinada a que los más pequeños puedan sentarse como es debido, y que puede quitarse cuando el niño crezca.